La Junta inscribirá la Casa Rudofsky de Frigiliana en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz

Actualizado: lunes, 17 agosto 2009 18:41

El inmueble fue la residencia de verano y última obra construida de este arquitecto

MÁLAGA, 17 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Junta de Andalucía ha iniciado el procedimiento para inscribir la Casa Rudofsky de Frigiliana (Málaga) en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz. El inmueble, que será reconocido como Bien de Interés Cultural (BIC) con la tipología de Monumento, fue la residencia de verano y última obra construida del arquitecto Bernard Rudosfsky (Moravia, 1905-Nueva York, 1988).

Esta obra, de importancia internacional y cuyo proyecto arquitectónico data de 1970, constituye un patrimonio indiscutible de la arquitectura contemporánea andaluza, tal y como subrayaron desde el Gobierno andaluz en un comunicado.

Refleja las propuestas que el autor desarrolló durante toda su carrera, las cuales trascienden la disciplina arquitectónica para comprometerse con el proyecto de nuevas formas de vida en un sentido pleno: sensibilidad hacia el territorio y el paisaje, austeridad de medios y recuperación contemporánea de la sabiduría de la arquitectura vernácula.

La singularidad de 'La Casa', como Rudofsky la llamaba, reside, además, en el respeto al paisaje rural y sus alrededores, para lo que se conservó tanto la topografía abrupta como la vegetación original de olivos, pinos e higueras, los cuales se insertaron perfectamente en el paisaje.

Se renunció así a la artificiosidad del proceso urbanizador, es decir, a los movimientos de tierras para manipular las cotas naturales o diseño de jardines, y se limitó la intervención a delicados senderos realizados con material cerámico artesanal.

OBJETIVOS

El habitar los espacios al aire libre y el derecho sagrado a la privacidad son dos objetivos fundamentales de la arquitectura de Rudofsky, tal y como desarrolla en sus escritos. Así se pone de manifiesto también en la que fue su última obra, y que proyectó en la parte baja de los montes de Frigiliana, una construcción en la que el autor difumina los límites de los espacios interiores, entendiendo aquellas zonas no construidas como una expansión natural de la casa.

En este sentido, el pórtico se convierte en elemento vertebrador de la Casa Rudofsky, distribuyéndose la vivienda en dos piezas a ambos lados del mismo, y se entiende éste como "un marco tridimensional del paisaje", según la definición del propio arquitecto.

Junto al pórtico, destaca también el patio, que se proyecta como una estancia más de la casa, como una habitación limitada únicamente por muros. El patio simboliza así las ideas rudofskianas, siendo el lugar físico y simbólico donde se concentra el carácter sagrado de la esfera privada.

El gran valor del interior de la casa radica en su sabia interpretación contemporánea y universalista de las claves locales y de la tradición de la vivienda mediterránea. La belleza de la Casa Rudofsky se encuentra precisamente en las ausencias y en esos vacíos que dejan los excesos innecesarios.

El arquitecto no sólo estudia el lugar como entorno físico y natural de su creación, sino también como fuente cercana de recursos materiales. Por ello, no es casual el empleo de la teja árabe y el barro para los revestimientos.

RUDOFSKY

Rudofsky fue arquitecto, crítico y escritor, con publicaciones como 'Architecture without architects', con 11 ediciones en distintos países, coordinador de exposiciones claves en el MOMA de Nueva YorK, diseñador de ropa, fotógrafo, artista plástico y profesor de universidades de prestigio.

Su obra es escueta, centrada en la escala menuda de lo doméstico, pero imprescindible como complemento del desarrollo de sus reflexiones sobre el habitar y que el autor complementó con sus publicaciones. En sus casas prevalece siempre la salvaguarda de la intimidad frente al colectivo, la lectura de la vivienda como un universo propio, contenedor simbólico de la construcción de la identidad personal.