El escritor Jesús Cotta confiesa que "si no escribiese poesía moriría de pena"

Actualizado: miércoles, 13 enero 2010 18:58

SEVILLA, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -

El escritor y profesor malagueño Jesús Cotta, que presenta hoy en Sevilla su libro 'A merced de los pájaros', editado dentro de la Colección Siltolá de poesía de la Fundación Ecoem, confesó que "si no escribiese poesía moriría de pena".

En declaraciones a Europa Press, el autor, que recientemente publicó 'Ulises y las sirenas. El dilema de la infidelidad', apuntó que para él "lo difícil es no escribir". Así, explicó que durante un tiempo, por razones laborales, le aconsejaron no escribir porque "tenía la cabeza en las nubes y lo intentó, pero no pudo".

En este sentido, Cotta añadió que "iba a explotar, pues la poesía no es una necesidad para él, sino que le rebosa y no lo puede evitar". Asimismo, aseguró que "la poesía le reconcilia con el mundo y le hace escribir cosas hermosas que antes no veía".

"El mejor premio para un poeta es que en el futuro se recuerde un poema suyo, pero no su nombre, porque eso significa que el poema es tan bueno que, sin un nombre que lo mantenga y lo defienda, el poema se defiende sólo por su calidad", así se expresa Cotta en su blog personal, recogido por Europa Press. Del mismo, concluyó que "si no escribiese poesía sería un hombre desgraciado".

'A merced de los pájaros', que se presenta hoy en Sevilla y que forma parte de la Colección Siltolá de Poesía, junto con las obras de Elías Marchite, Miguel Agudo, Olga Bernad y Juan Antonio González Romano, reúne 37 poemas de 15 años de producción poética del malagueño.

En este trabajo poético se aborda, según Cotta, el amor y, sobre todo, la naturaleza, intentando mostrar "el asombro y el agradecimiento ante tanta belleza del mundo". De igual modo, resaltó que ha pretendido "eternizar la belleza", pues, según precisó, "en el mundo hay cosas hermosas que tristemente se quedan en el recuerdo, así que mediante los versos se hace eterno".

El escritor confesó a Europa Press que "le hubiese gustado que su padre pudiera leer los poemas, porque siempre le orientaba como su maestro y su guía". Gracias a que éste le regalaba libros de poemas, Cota "cayó enfermo de poesía".

Cotta publicó sus primeros poemas en la revista 'Nadie parecía' de la editorial Renacimiento, en el año 2001. Su primer libro publicado fue el ensayo 'Topicario: arpones contra el pensamiento simple, en 2005, el mismo año que lanzó su novela 'Las vírgenes prudentes'.