Los dueños de las mascotas podrán acceder con los canes durante todo el año y deberán cumplir una serie de requisitos
FUENGIROLA (MÁLAGA), 4 Abr. (EUROPA PRESS) -
El municipio malagueño de Fuengirola cuenta ya con su playa canina, de más de 2.000 metros cuadrados, en el entorno del Castillo Sohail, convirtiéndose así en la segunda localidad de la provincia con un espacio así, junto con Casares.
La alcaldesa, Esperanza Oña, y la edil de Playas, Ana Mula, han visitado la zona para dar a conocer este nuevo espacio del litoral fuengiroleño, que permite la entrada de perros a la arena y al área de baño durante todo el año. Con la creación de este recinto se ofrece un servicio más a los ciudadanos, al mismo tiempo que se da cumplimiento y respuesta a una demanda vecinal.
"Hemos establecido en nuestras ordenanzas, siempre desde el más absoluto respeto a la legalidad, que los perros puedan acceder a esta playa y convivir con las personas que están en ella. Está completamente señalizada y hay suficientes papeleras para que tenga un buen uso", ha detallado Oña, quien además ha insistido en la necesidad de que haya una buena convivencia y respeto entre animales y personas.
La nueva zona de esparcimiento dedicada a los canes está ubicada en las inmediaciones del término municipal de Mijas, por la zona del Castillo Sohail. De hecho, el Ayuntamiento fuengiroleño se puso en contacto con el mijeño para desarrollar este proyecto y así conseguir que esta parcela especial para los canes tenga mayores dimensiones, pasando a contar entre ambos con unos 5.000 metros cuadrados en total destinados al uso y disfrute de los amantes de los animales.
En concreto, el espacio dedicado a este uso concreto y competencia del Ayuntamiento de Fuengirola, dispone de 2.114 metros cuadrados, está delimitado mediante un vallado de mimbre natural y señalizado con carteles ubicados en las papeleras de madera con la que cuenta la misma. Cada equipamiento y mobiliario instalados están además pensados para que los usuarios puedan disfrutar y divertirse en el mar y la arena. Por tanto, la estética de este recinto también está adaptada a su uso pionero.
Para hacer uso de esta área del litoral se han establecido una serie de requisitos que deben cumplir los dueños que acudan con sus perros, como los siguientes: los animales que accedan a esta playa específica deberán estar controlados en todo momento y si pesan más de 20 kilos tendrán que usar bozal; se tendrá que evitar que realicen deyecciones en la arena y los propietarios llevarán bolsas higiénicas para recoger las posibles deposiciones. También los dueños están obligados a portar la documentación del animal.
En este caso, aquellas personas que asistan con sus animales pueden permanecer en esta playa, según se aprobó en la junta de gobierno local de fecha 21 de marzo, en horario de 10 a 23 horas, en verano, y de 10 a 21 horas, en invierno. Se ha limitado a esos tiempos por la necesidad de realizar trabajos intensivos de limpieza que demanda esta playa especial.
"Las personas que asistan a esta playa con sus perros tienen las mismas obligaciones que en cualquier otro lugar. Es decir, tienen que recoger las deposiciones, si es considerado como peligroso, debe llevar bozal y respetar la ley y lo contenido en la ordenanza. Aquí pueden disfrutar, pero siempre cumpliendo las normas", ha informado la regidora, quien ha detallado que con esta clase de propuestas se busca que los animales tengan también su espacio dentro del término municipal.
La regidora ha recordado que para hacer realidad este proyecto fue necesario aprobar en el pleno del pasado mes de noviembre una modificación de la ordenanza municipal reguladora del uso y disfrute de las playas, sin que se produjesen alegaciones ni sugerencias a este respecto. De este modo, y dando cumplimiento a la ley, dicho cambio en la citada norma, se publicó el pasado 10 de febrero en el Boletín Oficial de la Provincia.
