SANTANDER, 14 Abr. (EUROPA PRESS) -
El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Santander ha presentado este lunes alegaciones a la Ordenanza municipal para el Control Ambiental Integrado de las Instalaciones y Actividades con el fin de "compatibilizar la actividad hostelera con el derecho al descanso de los vecinos". En este sentido, ha subrayado que las alegaciones buscan que el derecho al descanso de los vecinos "no pase a un segundo plano".
Así lo ha anunciado este lunes en un comunicado la portavoz socialista, Judith Pérez, quien ha destacado que se trata de una normativa "fundamental" para Santander dado que detrás de ese "confuso título" se recoge la ordenanza que marcará la convivencia entre el sector de la hostelería y los vecinos.
Pérez Ezquerra ha defendido que "hay que apoyar al sector hostelero como generador de economía" pero, ha advertido, "eso no debe servir para obviar el derecho al descanso de los vecinos de Santander y proteger siempre el interés general por encima del particular".
"Esta ordenanza debe servir para mejorar la calidad de vida de los vecinos, haciéndola compatible a su vez con la actividad hostelera", ha concluido la dirigente del PSOE.
En sus alegaciones, los socialistas, que fueron el único grupo municipal que presentó enmiendas, defienden la conveniencia de aprobar simultáneamente a la ordenanza un estudio con los 'mapas de ruidos' que definan las zonas ya saturadas acústicamente y en riesgo de saturación.
En estos casos en las que las zonas estén "contaminadas acústicamente", el Ayuntamiento podrá adoptar unos límites para la concesión de más licencias de establecimientos hosteleros.
Del mismo modo, desde el PSOE han reiterado la necesidad de fijar unos horarios de apertura y cierre para el funcionamiento de las terrazas.
Igualmente, señalan que el artículo que regula la extracción de humos entra en "contradicción" con el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y que, por lo tanto, la ordenanza, al ser de rango inferior, estará sometida al mismo.
En cuanto a las labores de inspección, rechazan que sean los propios hosteleros y los vecinos quienes tengan que sufragar dicho servicio de control, excepto en aquellos casos en los que se observe mala fe, ya que esto "repercutiría negativamente en la voluntad de colaboración vecinal" ante los posibles incumplimientos.
Finalmente, Pérez Ezquerra ha recriminado al equipo de Gobierno (PP) que no haya informado y "dado voz adecuadamente" a los vecinos a pesar de la "trascendencia" de la ordenanza, al tiempo que ha recordado que la única participación vecinal ha sido gracias a la insistencia del PSOE para que se llevara a los Consejos de Distrito.
