La norma incluye un Pacto Social por la Cultura, un plan de fomento de la lectura, y un Observatorio del Libro y la Lectura
TOLEDO, 14 Jul. (EUROPA PRESS) -
La futura Ley de la Lectura y de las Bibliotecas de Castilla-La Mancha, que fue tomada en consideración este martes por el Consejo de Gobierno, permitirá, entre otras cuestiones, garantizar el objetivo del Gobierno regional de hacer posible el acceso a la lectura al 100 por cien de la población de Castilla-La Mancha, a lo largo de 2010.
Así lo ha manifestado en rueda de prensa la portavoz de la Junta, Isabel Rodríguez, quien ha explicado que esta nueva normativa establece la planificación y coordinación de todas las administraciones públicas, así como del resto de los agentes sociales públicos o privados, y de las industrias culturales de Castilla-La Mancha, con el fin de involucrarles en ese fin común.
Asimismo, ha asegurado que el principal objetivo de esta futura ley --"que ha sido consensuada con el sector de las bibliotecas"--, es continuar con el fomento e impulso de programas y medidas encaminadas a potenciar el hábito lector entre la ciudadanía y que "todos y todas tengan acceso a una biblioteca pública" y a la lectura.
La portavoz ha destacado que Castilla-La Mancha es la comunidad autónoma que más servicios bibliotecarios ofrece a los ciudadanos, poniendo de relieve que en la región existen más de 560 centros de estas características. También ha aprovechado para decir que el servicio de bibliotecas es el más utilizado después del servicio sanitario.
En este sentido, Rodríguez ha apuntado que el Gobierno de Castilla-La Mancha está llevando el servicio bibliotecario al 99,20 por ciento de la población de Castilla-La Mancha. También ha explicado que esta futura ley sustituye a la actual norma, que data de 1989.
De este modo, ha concretado que la ley va a poner en marcha nuevos programas como la ampliación del servicio de bibliotecas solidarias dirigida a colectivos con dificultades de inserción social como los inmigrantes.
Asimismo, se pretende potenciar la industria cultural de Castilla-La Mancha con la creación de un Pacto Social por la Cultura, la puesta en marcha de un plan de fomento de la lectura, y la creación del Observatorio del Libro y la Lectura de Castilla-La Mancha.
