BARCELONA, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
El pleno del Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado definitivamente este viernes el nuevo Plan de Usos del barrio de Sant Antoni, en el que se limitará la apertura de establecimientos centrados en determinadas actividades, entre los que figuran restaurantes, bares, locales musicales y de alquiler de vehículos.
La regulación, que se ha aprobado con el apoyo de todos los grupos excepto las abstenciones del PDeCAT y Cs y el rechazo del PP, excluye las fincas con fachada en la avenida Paral·lel --menos las de la manzana de las calles Parlament y Viladomat-- y las que dan a la Gran Via, y pretende preservar la diversidad comercial y evitar efectos colaterales tras la reapertura del Mercat de Sant Antoni.
El objetivo de la normativa es garantizar el equilibrio en la implantación de actividades y servicios en el territorio, y mantener la masa residencial y la convivencia entre los diversos usos urbanos, y se ha aprobado tras una suspensión de licencias acordada en febrero de 2017 para evitar la proliferación de determinadas actividades mientras se preparaba la normativa.
La normativa no admite locales de juegos de azar --incluyendo salones de juegos y máquinas recreativas y bingos--; juegos recreativos; juegos deportivos; atracciones recreativas; establecimientos con máquinas expendedoras de alimentos, y espacios que ofrezcan alojamiento fraccionado por tiempo, incluidos los llamados 'meublés'.
Otras actividades quedan restringidas y condicionadas, como las de establecimientos musicales y comerciales y de restauración, incluyendo bares, restaurantes, horchaterías, heladerías, salones de banquetes, tiendas de platos preparados, comercio alimentario con degustación.
También se condiciona la apertura de gimnasios; locutorios; 'karaokes'; supermercados de más de 150 metros cuadrados; establecimientos de venta o alquiler de motos y complementos y de reparación de material de vehículos; establecimientos de exhibición sexual; de material pornográfico y locales de prostitución, y establecimientos que comercializan servicios turísticos.
APARCAMIENTO EN SUBSUELO
Pese al rechazo de PDeCAT, Cs y PP, el pleno ha aprobado provisionalmente modificar las normas urbanísticas que regulan los aparcamientos en subsuelo, reduciendo los necesarios para construir vivienda protegida y equipamientos de barrio --en los que se eliminan--, para evitar generar una oferta excesiva, porque Barcelona es la ciudad europea con más plazas de aparcamiento por vivienda, según la teniente de alcalde Janet Sanz.
"Continuarán haciéndose plazas de aparcamiento, pero de forma controlada", ha asegurado Sanz, que ha dicho que en Barcelona existen 770.000 plazas de aparcamiento --650.000 de ellos en el subsuelo-- y que hay censados 580.00 vehículos, a lo que grupos de la oposición han replicado que estas plazas no están distribuidas de forma homogénea en la ciudad y que hay barrios con aparcamiento insuficiente para los vecinos.
El contenido de esta noticia está elaborado en colaboración con el Ayuntamiento de Barcelona
