BARCELONA, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
La comisión de Presidencia y Régimen Interior del Ayuntamiento de Barcelona ha iniciado los trámites para modificar la ordenanza de civismo y restringir el consumo de alcohol en la calle, al aprobarse una proposición con los votos de CiU y PP.
La ordenanza prohibe ahora beber alcohol si se causan molestias a los vecinos, y sólo se autorizan envases de plástico --no latas ni botellas de vidrio--, pero la reforma --que deberá refrendar de nuevo la comisión y luego el plenario-- prohibirá también el plástico.
El primer teniente de alcalde, Joaquim Forn, ha informado de que el año pasado impusieron 36.000 sanciones vinculadas con el consumo de alcohol en el espacio público.
