Foto: SCT
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BARCELONA, 26 May. (EUROPA PRESS) -
Trànsit ha puesto en marcha tres radares por tramo en la N-340 de Amposta a Sant Carles de la Ràpita, uno por sentido, y la C-65 de Cassà a Llagostera.
El director del Servei Català de Trànsit (SCT), Joan Josep Isern, ha explicado este lunes en declaraciones a los medios que estos radares utilizan un sistema de control de velocidad media a través de dos lectores de matrícula al inicio y final del tramo controlado, que calculan el tiempo que tarda el vehículo en recorrerlo para determinar si ha superado el límite de velocidad.
Estos radares, que se suman al que ya estaba funcionando desde diciembre de 2009 en el Túnel de Vielha (Lleida), "son los primeros que se colocan en carreteras convencionales" y empezarán a multar este martes, según Isern.
El director del SCT ha resaltado que con estos radares buscan "la pacificación de las velocidades, conseguir una política más justa respecto a los excesos y reducir la siniestralidad en tramos conflictivos", además de sensibilizar a los conductores.
Los dos radares por tramo colocados en la N-340 cubren un tramo de 4,46 kilómetros y entre los puntos kilométricos 1.079,220 y 1.074,760, y el radar de la C-65 será de 5,075 kilómetros, entre el kilómetro 17,220 y 12,145, y se limitarán a 100 kilómetros por hora.
Entre finales de 2014 y principios de 2015, Trànsit prevé poner en marcha otros seis radares por tramo, que ya están en licitación: uno en la C-58 entre Sabadell y Badia del Vallès en sentido Barcelona (5,5 kilómetros), en la AP-7 entre Ulldecona y Amposta (Tarragona) en sentido Barcelona (18 kilómetros), dos en la N-II entre Fornells de la Selva y Quart (Girona), uno por sentido (4,9 kilómetros), y dos en la N-II en Girona (3 kilómetros).
Isern ha explicado que se decide donde instalar estos radares a partir de las recomendaciones de los Mossos d'Esquadra de Tráfico y los datos recogidos sobre el nivel de siniestralidad en las carreteras.
ANTECEDENTES
El sistema de radar por tramo se instaló por primera vez en España en el Túnel de Vielha en diciembre de 2009, con un límite de 80 kilómetros por hora, y se empezó a multar en julio de 2010.
Desde entonces y hasta el 18 de mayo se han impuesto 1.957 sanciones firmes por exceso de velocidad: 280 en 2010, 524 en 2011, 706 en 2012, 290 en 2013 y 157 en lo que llevamos de año.
