MADRID, 13 Abr. (CHANCE) -
La última victoria judicial de Belén Esteban ha sentado como un jarro de agua fría en el círculo más íntimo de Toño Sanchís. El representante de famosos ha sido condenado a pagar 600.000 euros a su exrepresentada y a asumir también las costas de este largo juicio.
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Tras dos años peleando en los tribunales, la justicia finalmente ha sentenciado que Toño cometió irregularidades a la hora de pagar a Belén Esteban por los contratos publicitarios y televisivos que tenía durante la década que trabajaron juntos. Una sentencia que ha dejado entre las principales damnificadas a Lorena Romero, esposa de Toño y socia en su empresa de representación.
Aunque en un principio Belén pudiese sentir pena por Lorena, la colaboradora de Sálvame cambió rápidamente de pensamiento para acusarla de "cómplice" de Sanchís: "Yo con ella me vi y se me puso a llorar. Le di facilidades y nada. Yo lo quería arreglar y no hubo manera, él no me dejó otra ¿Ella no ve cómo él habla de mi? Lo sabe; a día de hoy sabe lo que hacía su marido. Yo la defendí, pero ahora no...".
Así explicaba Belén en SEMANA su relación rota con la que un día fue su amiga: "Ella me engañó como él, es evidente". Además, Esteban no dudó en afirmar en exclusiva para las cámaras de Europa Press que no descarta ir por lo penal contra Toño Sanchís: "Yo voy a ir a por una empresa, ahí viene bien claro, yo quien esté en esa empresa".
Ante tal situación, Lorena Romero ha decidido dar la callada por respuesta y no contestar a nuestras preguntas sobre el futuro judicial de su empresa y de su marido.
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