Zapatero admite la "pérdida de capacidad" de la economía española para crear empleo

Actualizado: miércoles, 4 junio 2008 19:15
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   MADRID, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -

   El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, admitió ayer el proceso de desaceleración y de "pérdida de capacidad" de la economía española para crear empleo como consecuencia "fundamentalmente" de las circunstancias internacionales, pero aseguró que España sabrá afrontar esta "dificultad y salir adelante".

   En la sesión de control al Gobierno en el Congreso de los Diputados, Zapatero respondía de esta manera al presidente del PP, Mariano Rajoy, que por segunda semana consecutiva le interpelaba sobre la situación de la economía española y la "pérdida de confianza" de familias y empresas.

   Zapatero, que indicó al líder de la oposición que no es conveniente ignorar las dificultades pero tampoco exagerarlas, destacó que la economía española ha tenido un ciclo de "alto" crecimiento y de "gran creación de empleo", pero reconoció que ahora está inmersa en un proceso de desaceleración.

   Sin embargo, el jefe del Ejecutivo se defendió de las críticas de Rajoy resaltando los "activos importantes" con los que cuenta la economía española, entre los que destacó unas cuentas públicas saneadas, un sistema financiero "sólido y fuerte" y 20 millones de personas trabajando, circunstancia que, según recordó, nunca había tenido España en un periodo de desaceleración.

   Además, intentó desmontar las acusaciones de Rajoy sobre la pérdida de confianza internacional en la economía española, asegurando que en 2007 la inversión extranjera directa alcanzó la cifra "récord" de 43.000 millones de euros y sólo en los tres primeros meses de 2008, esta inversión se ha situado en 3.500 millones, frente a la desinversión de 600 millones en el mismo periodo de 2006.

   "Hay confianza en el mundo sobre la economía española porque ha hecho un buen recorrido, y yo le aseguro que hemos sabido hacer crecer a la economía muy bien y crear mucho empleo y sabremos afrontar esta dificultad, salir adelante y ver cómo España crece con fuerza porque ésta es la actitud y el espíritu de los empresarios y de los trabajadores españoles", espetó al líder de la oposición.

   Rajoy, que comenzó su intervención recordando a Zapatero los datos económicos conocidos esta semana, como el aumento del IPC hasta el 4,7% en abril, el aumento del diferencial con la zona euro hasta 1,1 puntos o el incremento del 19,1% del déficit exterior en el primer trimestre, afeó al jefe del Ejecutivo que, a pesar de esta situación, se limite a hacer "comentarios, chascarrillos y chistes" en lugar de comportarse como un gobernante y adoptar decisiones.

RAJOY: FAMILIAS Y EMPRESAS LO PASAN MAL.

   "El tema es que tiene que decir cómo se pone remedio a esta situación porque es el presidente del Gobierno de España. Las familias y las empresas lo están pasando muy mal y no quieren ni comentarios, ni chascarrillos, ni chistes, quieren que se comporte como un gobernante y adopte decisiones", señaló Rajoy, tras indicar que hoy mismo la OCDE ha situado en el 1,6% el crecimiento para España en 2008, "menos que la media de la UE".

   Igualmente, echó mano de la encuesta del CIS, que revela que el 46% de los españoles ve mal o muy mal la situación económica, y de los últimos indicadores de confianza del ICO y de la UE, que se sitúan en cifras históricamente bajas, para asegurar que la confianza de empresas y familias "está en mínimos", mientras "parece" que al presidente del Gobierno "no le importa".

   "No le estoy preguntando al comentarista, sino a un gobernante que tiene que tomar decisiones", reiteró Rajoy, tras criticar a Zapatero por haber llegado incluso a decir que era necesario hacer un seminario entre expertos para ver si España está en crisis o en desaceleración.

   Ante estas críticas, Zapatero recomendó a Rajoy que "no debería fiarse tanto de las encuestas", y reiteró que el Gobierno para ayudar a las familias ha puesto en sus bolsillos 5.000 millones de euros a través de la rebaja de los 400 euros del IRPF, ha aumentado las pensiones mínimas y la ayuda a la vivienda y mantendrá el ritmo inversor en infraestructuras y en I+D+i, junto con la defensa del diálogo y la concertación social.