BRUSELAS, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea ha anunciado este lunes la apertura de una investigación en profundidad sobre la adquisición del grupo experto en seguridad digital Gemalto por parte del proveedor francés de equipos aeroespeciales y de defensa Thales, ante la sospecha de que la operación puede incrementar los precios y reducir las opciones y la innovación para los consumidores de módulos de seguridad de 'hardware'.
La compañía gala se impuso a Atos cuando a finales de diciembre anunció la compra de Gemalto por unos 4.800 millones de euros. En concreto, Thales ofreció a Gemalto 51 euros en efectivo por dividendo compartido.
Sin embargo, los servicios de Competencia del Ejecutivo comunitario han abierto una investigación para determinar si la adquisición puede suponer un peligro para la competencia dentro del bloque comunitario. Bruselas debe pronunciarse al respecto como muy tarde el próximo 29 de noviembre.
En particular, la Comisión Europea cree que la transacción eliminaría la "presión competitiva" que actualmente existe entre Thales y Gemalto en el mercado de módulos de seguridad de 'hardware', así como sobre el resto de formas rivales que sigan activas en el sector. Esto conlleva el riesgo de "crear un actor dominante a nivel europeo y global".
Bruselas también sospecha que la compra puede reducir el número de actores en el mercado y, a través de menores incentivos para competir, provocar un aumento de los precios y una reducción de la inversión en innovación.
El Ejecutivo comunitario ha abierto la investigación precisamente para determinar si sus sospechas son ciertas. Las pesquisas se centrarán por tanto en conocer en qué medida Thales y Gemalto son competidores "cercanos", la respuesta potencial de los competidores y la capacidad de las soluciones de 'software' para conseguir el mismo nivel de seguridad que los módulos de seguridad de 'hardware'.
La comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, ha explicado que la apertura de la investigación busca garantizar que la compra de Gemalto por parte de Thales no provocaría "mayores precios o menos opciones" para consumidores que desean "encriptar de forma segura sus datos".
"Nuestra sociedad depende cada vez más de las soluciones de seguridad de datos para garantizar todo tipo de información social, comercial o personal", ha expresado la danesa.
