BRUSELAS, 29 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Unión Europea solicitó hoy formalmente consultas con Filipinas bajo la mediación de la Organización Mundial del Comercio (OMC) por el régimen "injusto" que este país aplica a la importación de bebidas espirituosas destiladas, incluidos el brandy español o el whisky escocés. Los impuestos aplicados son entre 10 y 50 veces superiores a los que aplica en el caso de sus productos nacionales, dependiendo del precio neto de venta al por menor del producto importado.
La comisaria de Comercio, Catherine Ashton, confió en que las partes puedan "encontrar una solución amistosa a este problema" a través de consultas en el marco de la OMC tras recordar que "este problema, que existe desde hace mucho tiempo, ha impedido que los exportadores de la UE compitan en condiciones justas en el mercado filipino, y ha provocado una fuerte disminución de las importaciones de bebidas espirituosas europeas". La industria europea lleva años planteando su malestar por esta cuestión.
Aunque el mercado filipino de bebidas alcohólicas ha experimentado un crecimiento constante en los últimos años --es uno de los mayores en toda la región de Asia y el Pacífico--, las exportaciones de bebidas espirituosas de la UE a Filipinas se han reducido de aproximadamente 37 a 18 millones de euros entre 2004 a 2007, mientras que las ventas de bebidas espirituosas locales han aumentado más de un 8% desde 2005. Alrededor de 47 millones de cajas de bebidas espirituosas fueron consumidas en Filipinas en 2007, incluidas algo más de un millón de cajas importadas, de acuerdo con el informe International Wine & Spirits Record (WSR).
Filipinas introdujo en 2004 una nueva legislación por la que incrementó los impuestos especiales un 30 % para las bebidas espirituosas principalmente producidas a nivel local y un 50 % para la mayor parte de bebidas espirituosas importadas.
El Gobierno filipino fijó previamente en una ley de 1996 un tipo impositivo específico inferior para las bebidas espirituosas producidas a partir de varias materias primas producidas en el país como la palmera nipa, la palmera cocotera y la palmera burí, el jugo, azúcar o jarabe de caña.
La Unión Europea considera que este régimen fiscal es "injusto" y "discriminatorio" y, por tanto, contraviene a su juicio el acuerdo general sobre aranceles aduaneros previsto por la OMC.
El objetivo de las consultas solicitadas hoy por la Unión Europea en el marco de la OMC es dar a las partes la posibilidad de tratar de resolver el problema sin tener que llegar a un litigio. Si las partes no llegan a una solución en un plazo de 60 días desde la recepción de la solicitud de consulta, la UE podrá solicitar la creación de un grupo especial en la OMC para analizar el problema.
