PALMA DE MALLORCA, 22 Sep. (EUROPA PRESS) -
Agentes del Cuerpo Nacional de Policía han desarticulado una organización dedicada a la introducción de importantes partidas de cocaína en la isla de Mallorca, en una operación que se ha saldado con cuatro detenidos, entre ellos dos históricos narcotraficantes, que recogían la droga en puertos de escasa importancia y control policial de la costa española a bordo de embarcaciones de recreo.
En el momento del arresto de tres miembros de la organización cuando recibían el envió de droga, los agentes se incautaron de 10 kilogramos y 300 gramos de cocaína, junto con cuatro vehículos. Posteriormente se procedió a la detención de un cuarto responsable y que tenía como misión la rápida distribución de la sustancia estupefaciente en la isla.
Entre los detenidos se encuentran dos importantes y conocidos traficantes que venían operando en Baleares desde hacía años. Entre ellos destaca Juan P. A. de setenta años de edad, aunque otros dos de los detenidos rondan también los 60. Los arrestados han sido ya puestos a disposición de la Autoridad Judicial que decretó su ingreso en prisión provisional y la intervención judicial de los efectos intervenidos.
La operación, denominada 'Palacio', ha sido realizada por el Grupo de Respuesta Especial contra el Crimen Organizado (GRECO) de Palma de Mallorca, perteneciente a la Comisaría General de Policía Judicial, tras varios meses de investigación.
GRANDES MEDIDAS DE SEGURIDAD
En las primeras investigaciones los agentes siguieron la pista de los responsables de esta organización que habían viajado hasta Cataluña para adquirir la droga, cuyo destino final era introducirla en Mallorca y para ello "empleaban un modus operandi muy seguro", informó la Policía en un comunicado.
La organización utilizaba embarcaciones de recreo, con las que recogían la droga en puertos con escasa vigilancia policial, y la transportaban hasta la isla realizando el trayecto de ida y vuelta en el mismo día. Un responsable del grupo se quedaba en depósito con la partida de coca para no precipitar la entrega y evitar posibles controles policiales.
Las medidas de seguridad adoptadas por esta organización llegaban al extremo de que sólo el encargado de transportar la droga conocía el puerto de destino y decidía la hora y lugar de entrega.
Ante esas dificultades se sometió a vigilancia ininterrumpidamente a los receptores de las cantidades trasladadas y, principalmente, sobre miembro de la organización encargado de realizar los traslados de la sustancia estupefaciente dentro de la isla.
Las investigaciones condujeron a los investigadores hasta el Puerto de Andratx donde se mantuvieron a la espera durante varias horas, hasta que observaron la llegada de un individuo en una embarcación de recreo hasta la rampa del varadero. Esta persona descendió del barco con una maleta tipo "trolley" y se dirigía hacia el exterior donde le esperaban los receptores de la droga.
Los miembros del grupo introducían la maleta en uno de los vehículos sometidos a vigilancia. En ese momento los agentes procedieron a la detención de los tres miembros que allí se encontraban y a la incautación de la mencionada maleta que contenía veinte paquetes que albergaban las cantidades de cocaína mencionadas.
