Aumentan hasta un 25% los menores extranjeros no acompañados que llegaron a estos centros
MADRID, 28 Jul. (EUROPA PRESS) -
La organización Nuevo Futuro atendió en 2017 a 1.644 niños y jóvenes tutelados en el mundo, de los cuales 1.288 fueron atendidos en los 98 hogares y centros que gestiona en España, según su Memoria de 2017.
Además, dentro de la Federación de Asociaciones de Nuevo Futuro, se encuentra la Asociación Nuevo Futuro de España --que cuenta con 14 delegaciones provinciales-- que el año pasado atendió a 916 menores en 62 hogares y centros, con un 95 por ciento de ocupación.
El 76 por ciento de todos ellos, un total de 631 menores, fueron acogidos en 52 Hogares Funcionales, centros residenciales donde viven hasta nueve niños de entre 0 y 18 años, y donde un equipo de educadores supervisa su día a día escolar, social y emocional.
El principal motivo de ingreso de los menores en los hogares de Nuevo Futuro es la adopción de medidas legales por abandono físico o negligencia (29 por ciento). Además, de la Memoria se desprende que ha habido un aumento significativo de ingreso de menores extranjeros no acompañados (Menas), que han representado un 25 por ciento del total frente al 14 por ciento del año anterior.
Asimismo, el 9 por ciento de los menores ingresa por maltrato emocional, y el 7 por ciento, por maltrato físico, entre otras causas como abusos, incapacidad de los padres o fracaso en el acogimiento familiar.
La mayor parte de los menores atendidos en estos hogares acuden a determinados tratamientos según sus propias necesidades. En este sentido, un total de 196 menores (26,5 por ciento) tuvieron trastornos asociados durante el último año. El más frecuente es el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), una de las causas más comunes del fracaso escolar.
Por otro lado, la asociación Nuevo Futuro cuenta con otro tipo de centros en España como el hogar de acogida inmediata en La Línea, Cádiz, donde atendió en 2017 a 109 menores que se encontraban en una grave situación de desprotección.
Otro de los hogares es para menores infractores, que se encuentra en Valladolid, donde trabajaron con 21 niños y jóvenes de entre 14 y 21 años. En ellos, se aplican una serie de medidas de convivencia con un grupo educativo, con el objetivo de reinsertarlos en la sociedad.
También cuenta con cuatro pisos de emancipación, dos en Madrid, uno en Santander y otro en Alicante, que tienen como objetivo preparar a los menores acogidos para una vida autónoma, una vez cumplen la mayoría de edad. En estos cuatro pisos, se ha atendido a un total de 17 jóvenes de 18 a 21 años.
La asociación también gestiona dos Centros de Día para menores en riesgo de exclusión social y familiar y que precisan de una atención complementaria de apoyo a la recibida en su familia. Estos centros se encuentran en Santander y Valencia y han recibido a un total de 64 menores en 2017.
Por otro lado, Nuevo Futuro cuenta con dos hogares para mujeres víctimas de violencia física, psicológica o con graves dificultades, donde recibió a seis mujeres con 13 hijos; y con una unidad dependiente en Madrid para madres que cumplen condena en tercer grado, donde atendió a seis madres y seis menores.
Además, la organización realiza distintos proyectos de refuerzo educativo para mejorar el rendimiento de los menores tutelados; otro de atención psicosocial; de promoción de hábitos saludables y de promoción de la igualdad.
ADOLESCENTE ESPAÑOL EN SITUACIÓN DE TUTELA
En cuanto al perfil de los menores, el 53 por ciento de los que atendió la asociación en 2017 tenía entre 15 y 18 años; el 24 por ciento, de 12 a 14 años; el 17 por ciento, de 7 a 11; y un 6 por ciento eran menores de 6 años. Siete de cada diez estaban en situación legal de tutela y el resto, en situación de guarda legal.
El 69 por ciento eran españoles, seguidos por un 15 por ciento de marroquíes. Además, un 13 por ciento de los niños y niñas tenían alguna discapacidad. En cuanto a los resultados académicos, la Memoria destaca que el 83 por ciento pasaron de curso.
Una de las menores que fueron acogidas en uno de estos centros, María Marín, asegura que puede decir que se ha criado "feliz". "Me han enseñado a tener educación y unos valores. Me han dado cariño, mucho cariño y nunca he carecido de nada. En su momento, uno está triste porque ve a sus amigos que están con sus familiares y tú no, pero ellos están pendientes de cada uno de tus miedos y carencias", afirma.
Para atender a todos estos menores, Nuevo Futuro contó en 2017 con el trabajo de 3.565 voluntarios, socios, donantes, madrinas y entidades colaboradoras.
