Actualizado 23/01/2008 16:53

Narbona y Clos dicen que las metas de la UE para España en energía y cambio climático son ambiciosas pero alcanzables

España tendrá que doblar el porcentaje de renovables en electricidad y aumentarlo un 6% en producción térmica


MADRID, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -

Los ministros de Medio Ambiente e Industria, Turismo y Comercio, Cristina Narbona y Joan Clos, respectivamente, se mostraron hoy satisfechos con el paquete presentado por la Comisión Europea para hacer frente al cambio climático en el horizonte de 2020 y aseguraron que los objetivos fijados para España en materia de sectores difusos (transporte, agricultura o vivienda) y en energías renovables son "ambiciosos, pero alcanzables".

"Si cumplimos con los objetivos del Protocolo de Kioto para 2012, España tiene capacidad para cumplir con el fijado para 2020", dijo Narbona. "A pesar de que son objetivos muy ambiciosos podemos tomar medidas para cumplirlos", añadió Clos. Ambos participaron en Madrid en un acto paralelo a la presentación en Bruselas de este paquete de propuestas en materia de energía y cambio climático por parte del presidente de la Comisión, Durao Barroso, en el que dos expertos comunitarios explicaron las implicaciones que los objetivos globales fijados, el llamado 20-20-20 (para el año 2020 se fija un 20 por ciento de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero respecto a los niveles de 1990 y un 20 por ciento de participación de renovables en el consumo final de energía).

"Queremos mostrar la satisfacción global del Gobierno ante la decisión de la Comisión porque ha tenido en cuenta consideraciones exigidas por España, en especial el PIB per cápita de cada estado miembro para fijar el reparto de esfuerzos de reducción en el sector difuso -dijo Narbona--. Se tiene en cuenta las condiciones de cada país y, además no se genera discriminación entre empresas establecidas en diferentes países a la hora de fijar los techos en los límites de emisiones". La titular de Medio Ambiente avanzó también que se convocará a la Comisión Interministerial de Cambio Climático, presidida por el Ministerio de Economía, así como a las comunidades autónomas y al Consejo Nacional del Clima para analizar más en profundidad este paquete de medidas.

OBJETIVOS, EN LA MEDIA EUROPEA

Por su parte, Clos explicó que España se sitúa en la media de las reducciones fijadas por la UE. Para el año 2020, deberá reducir en un 10 por ciento (respecto a los niveles de 2005) sus emisiones en transporte, agricultura o vivienda, y elevar hasta un 20 por ciento su porcentaje de renovables. Como en la actualidad este porcentaje es del 8 por ciento, el esfuerzo español será de incrementar la cuota un 12 por ciento. Además, la Comisión Europea ha eliminado las asignaciones nacionales a los sectores industriales sometidos a la directiva europea de comercio de derechos de emisión (aluminio, acero, cemento o químico). Para todos ellos se fija un objetivo común de reducción del 21 por ciento (respecto a los niveles de 2005) independientemente del país en el que se ubiquen.

Respecto a las renovables, Clos recalcó que el porcentaje de las mismas variará en función de los sectores energéticos, por ejemplo, en la producción de electricidad, donde ahora tienen una cuota del 23 por ciento, tendrá que elevarla a más del 40 por ciento; mientras que en la generación térmica (calor o refrigeración), con un 3,6 por ciento de participación actual, deberá elevarse hasta un 6 por ciento. En cuanto a los biocarburantes, para los que Bruselas ha fijado un objetivo común del 10 por ciento en los transportes, España tiene una participación del 0,6 por ciento actual, por lo que tendrá que hacer un esfuerzo prácticamente de ese 10 por ciento.

"Estamos muy satisfechos de que se dé libertad al sistema de decisión de fomento de renovables, que para España y Alemania es un sistema de complemento de tarifas a estas energías, mientras que otros utilizan un certificado verde o las subastas", añadió el titular de Industria. Además, aplaudió el sistema paneuropeo de reducción de emisiones en los grandes sectores industriales, muy sensibles y que dependen de la competitividad en precios. "Queda resuelto de forma clara y transparente la posibilidad de que las grandes industrias que dependen del consumo energético pudieran decidir cambiar de ubicación. Es un segundo motivo de satisfacción", indicó.

Los expertos de la Comisión recordaron también que el paquete establece que los derechos de emisión (por un valor de 1.720 millones de toneladas de CO2 equivalente) ya no serán gratuitos sino que se someterán a subasta. Al mismo tiempo, recordaron que para que un biocarburante se considere como tal deberá ahorrar al menos un 35 por ciento de emisiones de CO2 y que el sector de la aviación se incluirá en este paquete de medidas si se consolida el acuerdo político alcanzado.