Actualizado 19/05/2010 21:19

La construcción de dos presas en Brasil amenaza la supervivencia de cuatro pueblos indígenas, según Survival

MADRID, 19 May. (EUROPA PRESS) -

La construcción de las presas de San Antonio y Jirau sobre el río Madera en el Amazonas brasileño amenaza la supervivencia de al menos cuatro pueblos indígenas no contactados, según recoge el informe de Survival International divulgado este miércoles.

"La construcción de las presas de San Antonio y Jirau debe suspenderse. Si no ocurre así, muchos indígenas verán sus tierras invadidas y sus recursos naturales saqueados. Los grupos no contactados podrían ser diezmados o incluso erradicados. El Gobierno brasileño será responsable de tal desastre", dijo el director de la ONG, Stephen Corry.

Este proyecto, que prevé la construcción de varias carreteras además de las obras principales, afectará directamente a las tierras de una de estas comunidades --los parintintin-- y colateralmente a otras tres poblaciones --los mujica nava, los jacareuba y los katawixi-- que también cazan y pescan en los terrenos donde se levantarán las presas.

"Nuestra tierra aún es virgen. Esperamos que este proyecto no continúe, porque nuestros hijos serán los que sufran. No habrá suficiente pesca o animales para cazar", manifestó Domingos Parintintin.

Además del daño medioambiental, el informe destaca las consecuencias que la llegada de foráneos para la ejecución de estos proyectos tendrán sobre la salud de los indígenas. Survival International teme que el vulnerable sistema inmunológico de los indígenas ceda ante enfermedades como la gripe, el sarampión, la malaria y la hepatitis y que estas diezmen dichas comunidades.

Por su parte, el presidente de la empresa francesa GDF Suez, encargada de la construcción de la presa de Jirau, Gérard Mestrallet, se defendió de estas acusaciones asegurando que el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, ha sido el primero en respaldar las obras en el Amazonas.

"Si alguien sabe lo que es bueno para la población brasileña y al mismo tiempo puede reflexionar sobre la preservación de los indígenas locales, ése es ciertamente el presidente Lula", señaló.

Sin embargo, el portavoz de los Kayapó, Megaron Txucarramae, rechazó este argumento recordando que el mandatario "ha demostrado ser el enemigo número uno de los indígenas", después de que autorizara la construcción de la presa de Belo Monte en el río Xingu a pesar de la oposición de los pobladores de estas tierras.