Actualizado 09/12/2009 20:52

Aborto.- OMC afirma que todos los médicos y enfermeros ya estudian las técnicas del aborto y que es "positivo"

También ve "positivo" que la Ley de Salud Sexual sea la primera norma que reconoce el derecho a objetar


MADRID, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Organización Médica Colegial (OMC) afirmó hoy sobre la propuesta, incluida en el proyecto de la nueva Ley de Salud Sexual y Reproductiva, de enseñar a practicar abortos a los alumnos de Medicina, en todas sus especialidades, y Enfermería, que ya se realiza y que es "positivo".

Así, según el presidente de la Comisión Central Deontológica de la OMC, Marcos Gómez Sancho, en todas las carreras de Medicina "ya se estudia la técnica para practicar abortos, donde profundizan después ginecólogos y obstetras".

"Es positivo que lo sepan, pero esta enseñanza ya se imparte", recalcó el doctor Gómez, para quien también "sería interesante" formar a médicos y enfermeros sobre las consecuencias psicológicas del aborto, que es "traumático y no exento de riesgos mentales".

Además, la OMC consideró "positivo" que la nueva Ley de Salud Sexual y Reproductiva reconozca, por primera vez en una norma, el derecho de los profesionales sanitarios a la objeción de conciencia frente al aborto. Sin embargo, pide que la objeción "no sea premiada ni castigada" y que todos los profesionales implicados en este proceso, también los anestesistas, tengan derecho a objetar.

El proyecto de la nueva Ley sobre Salud Sexual y Reproductiva e Interrupción Voluntaria del Embarazo, que será debatido mañana en la Comisión de Igualdad del Congreso y votada en Pleno el próximo 17 de diciembre, reconoce el derecho a la objeción de conciencia de los profesionales sanitarios directamente implicados en el aborto.

SIN PREMIOS O CASTIGOS POR OBJETAR

Entre las condiciones para objetar es que debe hacerse por escrito y de manera individual para evitar las "objeciones colectivas" de todo un hospital o un servicio de Ginecología y para garantizar el derecho de la mujer a someterse a un aborto en un centro público.

A su juicio, que se prohíban las objeciones de hospitales en bloque es "lógico" porque "no es admisible que un servicio o un hospital realicen una objeción de conciencia". "Sólo las personas individuales tienen conciencia y cada uno tiene la suya y puede expresarla por escrito", aseveró.

También se mostró conforme con la posibilidad de que, con el objetivo de organizar el trabajo del día a día, se elabore en cada centro una lista de profesionales objetores al aborto. A su entender, se trata de una medida "para organizar la objeción, evitando abusos y haciendo respetar los derechos de todos".

No obstante, el registro "tiene que ser secreto" y debe manejarlo el jefe de servicio, encargado de coordinar las tareas, "sin necesidad de que llegue a manos del director del centro" y para evitar que, por practicar abortos o no, "se den premios o castigos".

Asimismo, el derecho a la objeción de conciencia debe ser de todos los profesionales sanitarios que, de forma directa o indirecta, intervengan en el proceso, ya que todos los implicados, casi en la misma medida, son necesarios para llevar a cabo la tarea.