Actualizado 04/04/2008 13:29

El cardenal García-Gasco toma posesión mañana en Roma de la Iglesia que le asignó Benedicto XVI en el consistorio

VALENCIA, 4 Abr. (EUROPA PRESS) -

El cardenal arzobispo de Valencia, Agustín-García-Gasco, tomará posesión mañana de la iglesia de San Marcello al Corso de Roma, asignada al purpurado por el papa Benedicto XVI en el consistorio del pasado mes de noviembre, en el que le creó cardenal, según informaron fuentes del Arzobispado en un comunicado.

En la ceremonia, que se llevará a cabo a las 18.00 horas en el templo romano, el cardenal García-Gasco presidirá una eucaristía en la que concelebrarán los tres obispos auxiliares de Valencia, monseñores Escudero, Benavent y Giménez, el obispo de Ibiza, monseñor Vicente Juan, así como otros prelados de Roma y numerosos sacerdotes valencianos, algunos de ellos residentes temporalmente en la capital italiana, donde se encuentran ampliando sus estudios.

La eucaristía contará, además, con la participación de un maestro de ceremonias de la Santa Sede. La misa de toma de posesión comenzará con el recibimiento al cardenal García-Gasco por parte de la comunidad de religiosos que rigen el templo, todos ellos pertenecientes a la orden de los Siervos de María (Servitas).

Después, el purpurado se dirigirá a la capilla de la Comunión, donde adorará al Santísimo. Al comienzo de la eucaristía, el rector de la iglesia de San Marcello, Luciano Masetti, dirigirá unas palabras de bienvenida al cardenal García-Gasco, quien oficiará la misa en latín y en italiano. En su homilía, no obstante, el cardenal arzobispo de Valencia empleará principalmente el castellano.

Al final de la misa, en la que cantará la coral de San Marcello, el superior general de los Servitas entregará al purpurado un obsequio. Una vez concluida, el maestro de ceremonias de la Santa Sede leerá un acta que refleja la toma de posesión del cardenal arzobispo de Valencia como titular de la iglesia de San Marcello al Corso. El acta será firmada por el propio maestro de ceremonias vaticano, que ejercerá como notario, así como por el cardenal García-Gasco y diversos sacerdotes y seglares asistentes a la ceremonia.

ESCUDOS COLGADOS

Desde el pasado mes de enero, en el templo romano, sito en la plaza San Marcello, junto a la calle del Corso y a pocos metros del monumento dedicado a Víctor Manuel II, están colgados los escudos del papa Benedicto XVI y del cardenal García-Gasco.

La asignación del título o la diaconía por parte del Papa a los nuevos cardenales es "signo de participación en la solicitud pastoral del Santo Padre hacia la ciudad de Roma", según han explicado fuentes del Arzobispado de Valencia.

La iglesia de San Marcello está registrando un "notable aumento del número de valencianos que lo visitan desde que fue asignada al purpurado", según aseguró el rector del templo, quien expresó su "alegría por la visita de los valencianos", ya que "ésta es su casa".

El templo de San Marcello, al que los papas asignan cardenales titulares desde el año 494, está hermanado desde el siglo XVII con la iglesia de El Salvador de Valencia, a través de sus respectivas archicofradías.

El hermanamiento, concedido por una bula del papa Clemente VIII en 1618, se debió, "entre otras razones, a las numerosas similitudes históricas, devocionales y artísticas que presentan las dos imágenes de Cristo" que se veneran en ambas iglesias, según explicó el canciller de la Archicofradía de El Salvador e integrante de la Real Academia de Cultura Valenciana, José Ballester-Olmos, quien ha iniciado una investigación sobre la confraternización entre ambas entidades.

Se trata de las imágenes del Cristo de El Salvador, venerado en la iglesia valenciana desde el siglo XIII, y la del Cristo Milagroso, ubicado en el templo romano desde el XIV y cuya talla se traslada a la Basílica de San Pedro todos los años jubilares desde el Miércoles de Ceniza hasta la Semana Santa. La propia imagen presidió la 'Jornada del Perdón', oficiada por Juan Pablo II el 12 de marzo durante el Jubileo de 2000 para pedir perdón por los pecados de la Iglesia.

Los orígenes de la iglesia de San Marcello, donde se encuentra la Casa Generalicia de los Servitas, se remontan a unas caballerizas del siglo IV, cuando el papa Marcello I (308-309) fue condenado a cuidar caballos por el entonces emperador Majencio.

Más tarde, ese establo fue convertido en iglesia y en su interior se colocaron los restos del papa Marcello, que murió mártir. La edificación actual data del siglo XII, pero un incendio en 1519 hizo necesaria la reconstrucción del templo bajo la dirección primero de Jacopo Sansovino y más tarde de Antonio Sangallo. La fachada barroca fue concluida por Carlo Fontana en torno en 1683. Su interior, de una única nave sostenida con columnas corintias, cuenta con cinco capillas.