Pego y García de Paredes se confirman como director general y adjunto y una oficina específica controlará la unión
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 28 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los consejos de administración de Caixa Galicia y Caixanova aprobaron hoy en sus respectivas reuniones el documento definitivo del plan de integración y el comité de dirección, que estará compuesto por 12 miembros (seis de cada entidad) y confirma a José Luis Pego --actual director general de Caixanova-- en el mismo cargo en la futura caja.
Asimismo, el consejo de administración estará integrado por 22 vocales (20 más los dos copresidentes) y el primer turno para ejercer las funciones de presidencia recaerá en Caixanova (desempeñará las labores el actual presidente, Julio Fernández Gayoso), aunque el acuerdo no da a conocer aún los nombres de los consejeros.
El director general adjunto ejecutivo será Javier García de Paredes (procedente de Caixa Galicia) y, de forma temporal, se creará un comité de integración, a cargo de Óscar Rodríguez (Caixanova) y Ramón Seoane (Caixa Galicia), que controlará los procesos de unión. Del primero de ellos dependerán las áreas de obra social, patrimonio y secretaría de dirección; mientras que al segundo corresponderán las responsabilidades en intervención, control del gasto y servicio de estudios.
La dirección de estrategia la ocupará Enrique Tellado (Caixa Galicia); mientras que Francisco Zamorano (Caixa Galicia) se encargará de riesgos; Domingo González (Caixanova) hará lo propio en planificación y control; y María Victoria Vázquez Sacristán, la única mujer en el cuadro de mando, se encargará de finanzas y mercados.
El departamento de tecnología y operaciones será encomendado a José Manuel Valiño (Caxa Galicia); mientras que el comercial será responsabilidad de Juan Díaz Arnau (Caixanova); el de medios corresponderá a José Venegas (Caixa Galicia) y el del grupo inmobiliario a Gregorio Gorriarán (Caixnova).
LA ASAMBLEA DE LA NUEVA ENTIDAD
El paso definitivo para la fusión de las dos cajas gallegas se producirá a finales de septiembre, según manifestó el actual presidente de Caixa Galicia, Mauro Varela, tras asistir al consejo de administración. En ese momento se convocarán las asambleas constitutivas y la nueva caja comenzará a operar como una sola.
La asamblea de la entidad única contará con 320 consejeros generales (160 de cada caja), mientras que el consejo tendrá 22 (11 por cada entidad). Asimismo, las comisiones de control, delegada y de retribuciones, inversiones y obra social serán "también paritarias", señalaron las cajas.
Caixa Galicia y Caixanova, que comunicaron la decisión a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), informaron también del contenido a la Xunta, como supervisora del proceso, y al Banco de España, al que presentarán formalmente la documentación mañana. En el documento de integración aprobado hoy se hicieron los ajustes requeridos por el regulador bancario, después de que las entidades presentasen el pasado 14 de abril el borrador del mismo.
SE MANTIENEN LAS GRANDES CIFRAS
Las principales magnitudes se mantienen con respecto a ese documento y las ayudas que Caixa Galicia y Caixanova solicitan del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) ascienden a 1.162 millones de euros, el 2% de los activos ponderados por riesgo de las dos entidades.
En un comunicado conjunto, las cajas defendieron que la nueva entidad tendrá unos 90.000 millones de euros de volumen de negocio, aunque prevén desinversiones que reduzca en 8.000 millones de euros la cifra inicial de activos ponderados por riesgo (APR). Además, la red de oficinas superará las 1.100 sucursales, aunque las entidades detectan el solapamiento de 300, por lo que se producirá una "reestructuración comercial".
Según el acuerdo adoptado por los dos consejos de administración --que no respaldaron únicamente los representantes de CC.OO. en Caixa Galicia en protesta por que no se hayan iniciado negociaciones sobre el impacto laboral--, habrá "igualdad en el número de miembros de cada caja en los órganos de gobierno" y se dará continuidad a los integrantes actuales, al tiempo que se garantiza la presencia de "todos los grupos de representación actuales de cada caja".
ALTERNANCIA EN EL MANDO
En la primera mitad del periodo de transición (18 meses) las funciones de presidencia (que tendrá voto de calidad en caso de empate) las ejercerá el representante de Caixanova, que será relevado después por el procedente de Caixa Galicia. El orden será el inverso en la comisión de control.
En cuanto a las vicepresidencias, se articulan en tijera, de modo que el primer turno en la vicepresidencia primera corresponde a Caixa Galicia; que se encargará también de la vicepresidencia tercera y la secretaría. Recaerá en Caixanova el primer turno en las vicepresidencias segunda y cuarta y la vicesecretaría.
LOS CONSEJOS TERRITORIALES
Además, se constituirán dos consejos territoriales, uno en A Coruña (el ámbito territorial es el de las provincias de A Coruña y Lugo) y otro en Vigo (para Pontevedra y Ourense). Las funciones, según apuntaron las cajas, serán "aprobar o denegar riesgos dentro de las políticas y de los límites cuantitativos y condiciones establecidas", así como colaborar en la gestión de la obra social.
La nueva caja gallega "asumirá todos los derechos y obligaciones de ambas cajas, no existiendo liquidación de ninguna de ellas" y las sedes se repartirán también entre A Coruña (sedes social y fiscal y cosede representativa, comercial y operativa) y Vigo (dirección efectiva de negocio, sede instituciones y cosede representativa, comercial y operativa). Además, las entidades aclararon que, aunque la obra social se integrará, durante los tres años de transición de mantendrán la Fundación Caixa Galicia y la Fundación Caixanova.
La nueva entidad prevé tener "resultados positivos" desde el primer ejercicio y devolver las ayudas del FROB en cinco años, tras lo que calcula que logrará un coeficiente de solvencia básico (core capital) superior al 7% y un TIER1 en torno al 10%.
