PALMA DE MALLORCA, 6 Ago. (EUROPA PRESS) -
El 17 por ciento de los niños baleares con discapacidad quieren ser futbolistas y el 6 por ciento bomberos, mientras que las niñas desean convertirse en actrices (25 por ciento), profesoras (16,7 por ciento) y enfermeras (8 por ciento), según una encuesta realizada por la Fundación Adecco tras ocho años estudiando las aspiraciones profesionales, inquietudes y deseos laborales de este colectivo con el objetivo de normalizar y eliminar barreras y falsos estereotipos.
Según el análisis, la proporción de niños con discapacidad que quiere seguir los pasos de sus padres en Baleares se eleva a un 10 por ciento, mientras que, si tuvieran que montar su propia empresa, se decantarían por la opción del restaurante y las niñas por una tienda de ropa.
"Hay algunos que ya tienen incluso decidido el nombre de su futuro negocio, como la niña que creará un establecimiento llamado 'El mundo de las magdalenas'", añade el informe, que destaca que hay profesiones "más curiosas, como la niña de trece años que desea ser ayudante de niños pequeños o la de ocho que aspira a convertirse en comadrona".
Mientras tanto, si los niños discapacitados de las islas pudieran elegir a su jefe, un 45 por ciento se decantaría por un amigo y un 12,5 por ciento, por un familiar. La familia ocupa un lugar esencial para los niños con discapacidad: un 67 por ciento "prefiere un futuro cerca de los suyos antes que ganar mucho dinero".
La encuesta llama asimismo la atención sobre el hecho de que este colectivo no hace referencia a sus competencias laborales o aptitudes profesionales, sino que ponen sobre la mesa cualidades relacionadas con su forma de ser, que consideran positivas para desempeñar un puesto de trabajo.
Así, tres aspectos se han repetido de forma sistemática: amabilidad (en el 24 por ciento de los casos), alegría (8 por ciento) y simpatía (6 por ciento). "Muchos de los niños con discapacidad han ofrecido respuestas en esta línea: soy alegre, soy alegre y amable, soy muy majo".
Además, un 5 por ciento se define como "buena persona" mientras el informe destaca el caso de un niño de nueve años que se define como "buen compañero" o la de once que dice ser "estudiosa".
Tal y como subraya el director general de la Fundación Adecco, Francisco Mesonero, "es muy importante darles voz y que se sientan parte imprescindible de nuestra sociedad, desde las edades más tempranas. Los pequeños con discapacidad son una fuerza laboral clave para nuestro futuro; una fuerza que, sin embargo, aún tiene muchos retos por delante. Por ello, desde el Grupo Adecco siempre les hemos incluido en nuestra encuesta".
