PARÍS, 18 May. (Reuters/EP) -
El exagente de bolsa francés, Jerome Kerviel, ha pedido al presidente François Hollande que intervenga para solucionar su caso o se quedará en Italia en lugar de comparecer en una comisaría francesa para comenzar su condena de tres años por provocar en 2008 pérdidas multimillonarias que casi llevan a la quiebra al banco francés Societé Generale.
Kerviel fue acusado hace tres años de traicionar la confianza depositada en él, falsificación y manipulación fraudulenta de datos.
Los jueces franceses han dictado una orden en la que se requiere que Kerviel se presente en una comisaría francesa este domingo por la tarde para entrar en prisión. Si Kerviel no se presenta en la comisaría francesa de Menton antes de medianoche, se le considerará fugado y se emitirá una orden de búsqueda y captura a nivel europeo para garantizar que cumple su condena.
"Me quedaré aquí por ahora, esperando a que el presidente responda", ha dicho Kerviel a los reporteros en el pueblo italiano de Ventimiglia, cerca de la frontera con Fracia. También ha afirmado que no es culpable y que su condena no ha sido justa.
La oficina del presidente francés ha asegurado en un comunicado este sábado que la petición de amnistía de Kerviel a Hollande será examinada según los procedimientos habituales. Kerviel ha asegurado que "no pide amnistía porque eso sería admitir que es culpable".
Un portavoz de la Societé Generale ha criticado este sábado la importancia que le han dado los medios de comunicación a este asunto, recalcando que Kerviel ha sido sometido a una meticulosa investigación y condenado tres veces.
