BAMAKO, 3 Jul. (Reuters/EP) -
Los funcionarios de Malí responsables de organizar las elecciones legislativas y presidenciales de este mes han extendido de forma indefinida su huelga hasta que se vean satisfechas sus reclamaciones de mejor seguridad y sueldos más altos, según los sindicatos.
Los sindicatos convocaron el 25 de junio una huelga de siete días para exigir más seguridad y mejoras laborales. Entre los convocados están los administradores, representantes del Gobierno a nivel local y responsables de organizar las elecciones, y sus subordinados.
"La huelga tendrá impacto en la organización de las elecciones. Había un programa de trabajo completo previsto para esta semana que ahora estará en duda", ha dicho Olivier Traore, secretario general del Sindicato Nacional de Administradores Civiles.
Sin embargo, Aboubacar Djire, asesor técnico en el Ministerio de Administración Territorial, ha negado que la protesta vaya a tener repercusiones en los preparativos para los comicios.
"Hay comisiones a cargo de distribuir las papeletas y estas comisiones siguen trabajando", ha recalcado. El Gobierno ha resaltado en varias ocasiones que las elecciones se celebrarán en la fecha prevista.
El presidente maliense, Ibrahim Boubacar Keita, buscará a finales de julio su reelección en unos comicios cuya legitimidad está en duda precisamente por la violencia que sigue imperando en el país africano, que en 2012 vivió su momento más tenso por la revuelta tuareg en el norte y el posterior avance yihadista.
En la última semana han muerto diez personas en sendos atentados contra la sede en el centro de Malí de la fuerza internacional G5 Sahel, creada el año pasado para combatir la violencia yihadista en esta región de África Occidental, y una patrulla franco-maliense en el norte del país.
