MADRID, 27 Jun. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha aplaudido este miércoles el acuerdo firmado durante la jornada en la capital de Sudán entre el presidente sursudanés, Salva Kiir, y el principal líder rebelde, Riek Machar, que prevé un alto el fuego permanente que entrará en vigor en un plazo de 72 horas.
Guterres ha pedido a las partes "un renovado compromiso para redoblar sus esfuerzos en interés de la paz" y ha resaltado que el pacto ha sido firmado "en un momento en el que la situación de seguridad sigue deteriorándose en parte de Sudán del Sur".
Así, ha pedido a las partes que "demuestren el liderazgo político necesario en este momento crítico en el proceso de paz" y ha aplaudido también la intención de Kiir y Machar de continuar las negociaciones.
Por otra parte, ha destacado los trabajos de la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo de África Oriental (IGAD) para acercar posturas y ha reiterado su disposición a extender el apoyo de la ONU para lograr un acuerdo "justo, inclusivo y aplicable".
El ministro de Exteriores sudanés, Al Dirdiri Mohamed Ahmed, ha detallado que el acuerdo firmado durante la jornada contempla un alto el fuego permanente que entrará en vigor en 72 horas, periodo durante el cual las partes deberán acordar todo lo relativo al mismo, incluida la liberación de prisioneros y la apertura de corredores humanitarios.
Además, las partes invitan tanto a los países de la IGAD como de la Unión Africana (UA) a "desplegar las fuerzas necesarias para supervisar el alto el fuego permanente". Igualmente, se comprometen a adoptar medidas para crear un Ejército y una Policía nacionales al margen de cualquier consideración étnica, y a desarmar a los civiles en todo el país, según el documento, publicado por la emisora sursudanesa Eye Radio.
Por otra parte, Kiir y Machar han acordado la formación de un Gobierno de unidad en el plazo de cuatro meses y que estará al mando del país durante un periodo de transición de tres años. Durante el mismo, se preparará al país para la celebración de elecciones, que "estarán abiertas a todos los partidos políticos y deberán ser libres y justas".
REUNIONES ENTRE KIIR Y MACHAR
Kiir y Machar se reunieron este lunes y martes en Jartum en el marco de los esfuerzos de la IGAD para lograr la paz en el país africano y como continuación del encuentro mantenido el jueves pasado en Adís Abeba, el primero entre ambos en dos años.
Tras la firma del documento, Kiir ha subrayado que "es el día que nuestro pueblo ha estado esperando y estoy feliz de que finalmente se haya logrado". "Estoy comprometido a aceptar todo el documento que he firmado y a cumplir todo el acuerdo", ha asegurado el presidente sursudanés, según informa la emisora Eye Radio.
Por su parte Machar, quien lidera el principal grupo rebelde que lucha contra el Gobierno sursudanés, ha afirmado que "este acuerdo tiene mucho significado porque supone que la guerra en Sudán del Sur tiene que acabar".
En opinión del antiguo vicepresidente, "este acuerdo es el principio de una nueva fase en las vidas de nuestro pueblo" y ha confiado en que "en un breve plazo tengamos un acuerdo completo, ya que todas las partes han acudido a Jartum". Asimismo, según Eye Radio, ha confiado en que lo acordado también permitirá que los refugiados y los desplazados que han buscado protección en los campamentos de la ONU puedan regresar a sus casas.
"Estoy muy contento con lo que ha ocurrido hoy. Hemos llegado a un acuerdo en un periodo muy breve de tiempo y esto ha sido porque los líderes han sido serios", ha destacado por su parte el presidente de Sudán, Omar Hasán al Bashir, quien ha ejercido como anfitrión y mediador entre las dos partes. "Este acuerdo es el principio de la paz en Sudán del Sur", ha aseverado. Tanto Kiir como Machar han agradecido a Al Bashir y a la IGAD sus esfuerzos.
El pasado 22 de mayo, la IGAD publicó una propuesta de reparto de poderes para tratar de buscar una salida al conflicto según la cual el 55 por ciento de los cargos irían a personas nombradas por el Gobierno, el 25 por ciento a las nombradas por el grupo encabezado por Machar, y el otro 20 por ciento al resto de partidos políticos.
Sudán del Sur vive inmerso en una guerra civil desde finales de 2013, cuando comenzaron los enfrentamientos entre las tropas leales al presidente y las fuerzas vinculadas a Machar. En el marco del conflicto han surgido otros grupos rebeldes que se han hecho fuertes en diversas partes del país y que mantienen una relación laxa con el mando de Machar.
