MYITKYINA, 12 May. (Reuters/EP) -
Más de cien insurgentes birmanos de la etnia palaung han lanzado a primera hora de este sábado un ataque masivo contra un puesto de control militar y contra un casino dirigido por fuerzas paramilitares a las afueras de la ciudad de Muse, en la frontera con China que ha dejado al menos 19 muertos -- quince civiles y cuatro miembros de las fuerzas de seguridad -- según ha confirmado el Gobierno birmano.
El conflicto abierto en el norte de Birmania ha escalado desde el mes pasado, un ejemplo de los múltiples frentes abiertos en el país, a pesar de las promesas de paz de la premio Nobel Aung San Suu Kyi, líder de facto tras años de dictadura militar.
El ataque de este sábado es uno de los más importantes de los últimos meses. Según el principal portavoz del Gobierno birmano, Zaw Htay, más de un centenar de insurgentes irrumpieron contra sus objetivos con armas ligeras y artillería. Entre los fallecidos civiles se encuentran dos mujeres y otras 20 personas han resultado heridas.
"Ahora están siendo perseguidos por el Ejército birmano. Esta gente no es ningún movimiento por los derechos étnicos. Esto ha sido un ataque terrorista", ha denunciado el portavoz.
El portavoz de los milicianos, Tar Aik Kyaw, ha reconocido que los civiles podrían haber muerto en el fuego cruzado, aunque ha responsabilizado a los paramilitares de atraer a la población civil "a estos casinos, que en realidad son una tapadera para la distribución de drogas, que no dejan de causar problemas entre la sociedad".
