Obama: "El sacrificio de los fallecidos de Normandía cambió el destino del siglo XX"

Actualizado: sábado, 6 junio 2009 19:08


COLLEVILLE-SUR-MER (FRANCIA), 6 Jun. (Reuters/EP) -

El presidente estadounidense, Barack Obama, rindió hoy homenaje a los fallecidos en el Desembarco de Normandía, cuyo sacrificio contribuyó hace exactamente 65 años, según sus palabras, a salvar el mundo de la tiranía y del mal.

En un discurso pronunciado en el cementerio de Colleville-sur-mer, Obama recordó la Segunda Guerra Mundial como un momento de la Historia donde las naciones luchaban unidas contra una ideología asesina. "Vivimos en un mundo donde las compiten las ideologías y las declaraciones sobre lo que es verdad y lo que no. En este mundo, es raro encontrarse con un enfrentamiento que hable de algo tan universal como es la humanidad en sí misma. Ese enfrentamiento fue la Segunda Guerra Mundial", proclamó.

En el cementerio, donde se descansan los restos de los 9.387 soldados estadounidense fallecidos y con vistas a la histórica playa de Omaha Beach, Obama recordó el desembarco como uno de los momentos determinantes del conflicto, que terminó perfilando el desarrollo de los años venideros. "Entonces nadie lo sabía, pero gran parte del progreso que definió el siglo XX, a ambos lados del Atlántico, comenzó en una batalla por un pedazo de playa de sólo siete kilómetros de largo por tres de ancho", declaró.

DESTINO HUMANO

El presidente francés, Nicolas Sarkozy, el primer ministro británico Gordon Brown, y el primer ministro canadiense, Stephen Harper, se unieron a Obama en el homenaje a los caidos, en una ceremonia bajo un cielo limpio y cristalino, en contraste con la fuerte lluvia que cayó sobre la playa el día del desembarco.

En su discurso, Obama declaró que el Día-D demostró que el destino humano no está determinado por fuerzas más allá de su control, sino por elecciones individuales, y por la acción conjunta.

Pero como nota personal, el presidente de Estados Unidos, Stanley Dunham, que llegó a Normandía un mes después tras el 'Día D', así como a su tío abuelo, Charles Payne, integrante de la primera división americana en conflicto que Obama definió como inevitable. "Ningún hombre que haya derramado sangre o haya perdido a un hermano puede decir que la guerra es buena, pero todos sabemos que esa guerra fue esencial".