DUBÁI, 23 Jul. (Reuters/EP) -
Un nuevo terremoto de magnitud 5,8 en la escala Richter ha sacudido este lunes a primera hora el sureste de Irán, lo que supone el cuarto seísmo registrado en el país en los últimos dos días, según han informado varios medios locales.
"Hasta el momento sólo tenemos indicios de daños provocados en algunas viviendas y por ahora no hay víctimas mortales", ha manifestado Majid Saeedi, que se encuentra al frente de la agencia de gestión de desastres de la provincia de Kermán.
Según Saeedi, los equipos de rescate han sido enviados a 26 localidades afectadas por el terremoto, que ha tenido lugar un día después de un seísmo de magnitud 5,9 se saldara con casi 290 heridos en la provincia de Kermanshá, en el oeste del país.
El Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés) ha señalado que el seísmo es de magnitud 5,5 y que su epicentro se encuentra a 37 kilómetros de la ciudad de Kermán. No obstante, el USGS ha indicado que el hipocentro estaría a tan sólo 10 kilómetros de profundidad, lo que podría amplificar su efecto.
El terremoto del domingo, por otra parte, se vio precedido por otros dos seísmos registrados en la provincia de Hormozgan (en el sur del país), de magnitud 4,7 y 5,7, respectivamente, que habrían causado únicamente daños materiales.
El gobernador de la provincia de Kermanshá, Houshang Bazvand, ha explicado a la agencia de noticias IRNA que ocho de los heridos se encuentran hospitalizados y que la gran mayoría han recibido el alta tras ser atendidos.
En noviembre de 2017 un terremoto de magnitud 7,3 sacudió la provincia de Kermanshá y se saldó con alrededor de 600 muertos y miles de heridos. En 2003, un seísmos de magnitud 6,6 acabó con la vida de 31.000 personas en la ciudad de Bam, en el sureste del país.
