ROMA, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro italiano, Matteo Renzi, ha negado este viernes que su Gobierno mantenga una relación tensa con la Unión Europea, después de que varios periódicos hayan acusado de burlarse del mandatario al presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Barroso, y al presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy.
"Con la Unión Europea no hay ni conflictos ni sumisión", ha asegurado Renzi durante la rueda de prensa que ha ofrecido en Bruselas un día después de que el intercambio de sonrisas entre Barroso y Van Rompuy al ser preguntados por las reformas italianas desatasen la polémica en Italia.
"He leído sobre las sonrisas entre Barroso y Van Rompuy, pero he encontrado esta reconstrucción lejos de la realidad. Mi objetivo es, sin embargo, hacer sonreír a las familias italianas. Los deberes son hacia ellos, no hacia Europa", ha afirmado el mandatario, según ha indicado el diario italiano 'La Repubblica'.
Renzi ha hecho hincapié en sus declaraciones sobre la buena relación que mantiene Italia con la Unión Europea, aunque también ha subrayado que su Gobierno no "cumple órdenes" de Bruselas. "No venimos aquí a cumplir órdenes, se llama Comisión, pero no es una Comisión de examen", ha asegurado.
"La posición de Italia no ha cambiado, estamos en una línea de absoluta continuidad con los gobiernos que nos han precedido. Tenemos que hacer del semestre italiano una gran oportunidad para Europa", ha dicho Renzi, en referencia a la presidencia de turno de Italia de la UE, prevista para el próximo mes de julio.
El mandatario, que alcanzó el poder en febrero después de la dimisión de su predecesor, Enrico Letta, ha hecho hincapié en numerosas ocasiones en la necesidad de desarrollar un ambicioso paquete de reformas, que pretende aprobar antes de que Italia presida el Consejo europeo.
"El punto central son las reformas y en las reformas el punto central son los tiempos de las reformas", ha afirmado Renzi, que ha anunciado que antes de que acabe el mes de marzo el Gobierno tiene previsto presentar el proyecto de ley para revisar el papel del Senado, además de aprobar la abolición de las provincias.
