Tsvangirai admite que "aún queda mucho por hacer" en el proceso de democratización

Actualizado: miércoles, 7 octubre 2009 19:15


MADRID, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -

El primer ministro de Zimbabue, Morgan Tsvangirai, admitió este miércoles que "aún queda mucho por hacer" en cuanto a la implementación de reformas políticas, sociales y económicas en su país, especialmente en lo referente al proceso de democratización, aunque también destacó que se han hecho "logros formidables".

Así, citó los progresos a la hora de "frenar el deterioro de la economía" --gracias, entre otras cosas, al "extraordinario" descenso de la inflación, que durante una parte de 2008 llegó a varios centenares de millones por ciento, la más alta del mundo-- o la apertura de hospitales y colegios.

Pero "seguimos viendo resistencia por parte de algunos individuos que han gozado de impunidad", afirmó en referencia a los aliados del presidente, Robert Mugabe, que gobierna desde 1980. "No les ha sido fácil seguir justificando los abusos, la violencia y los ataques contra ciertas personas", añadió.

Tsvangirai reconoció que "aún queda mucho por hacer, y un punto de referencia crítico es la agenda para la democratización". En este sentido, señaló que algunos puntos del acuerdo que alcanzó en septiembre de 2008 con Mugabe para formar un gobierno de unidad "no se han cumplido".

"Uno de los objetivos es que el sistema judicial sea independiente y que la Policía deje de estar implicada en la limitación de los Derechos Humanos", declaró Tsvangirai en la Conferencia Anual de la Asociación Internacional de Abogados, celebrada en Madrid.

Respecto a la cuestión de los Derechos Humanos, el primer ministro denunció que "el nivel de abusos" que existe en Zimbabue "casi se ha aceptado" debido a la "impunidad" y recordó a las víctimas de torturas y violaciones y a las que se han quedado sin hogar.

SER LA OPOSICIÓN EN ZIMBABUE

Para Tsvangirai, la causa de los problemas de Zimbabue es que, como en muchos países africanos, ser la oposición al Gobierno "es casi hacer una declaración de guerra", es "como ser enemigo del Estado". Sin embargo, defendió el papel que han desempeñado él mismo y su partido, el Movimiento para el Cambio Democrático (MDC), porque "siempre" han estado "comprometidos" con la transición a la democracia.

En Zimbabue, al contrario que en otros países africanos, "hemos renunciado a la tentación de coger las armas y hemos elegido el diálogo, hemos elegido resolver nuestros problemas pacíficamente", aseguró. Tras las elecciones del año pasado se generó una grave crisis política en Zimbabue porque la segunda vuelta, celebrada en junio, la ganó Mugabe pero Tsvangirai no llegó a presentarse debido al hostigamiento y las reiteradas detenciones sufridas por los miembros del MDC.

A pesar de que, tras un arduo proceso de negociación, la oposición y el Gobierno llegaron a un acuerdo hace un año para compartir el poder, el partido del primer ministro se ha quejado en numerosas ocasiones de que Mugabe y la formación que encabeza, la Unión Africana-Frente Patriótico (ZANU-PF), se resisten a cumplir algunas disposiciones del mismo.

Aun así, Tsvangirai justificó el pacto con su rival --en el que no confía, según confesó-- afirmando que ambos se han comprometido a resolver la crisis económica, poniendo "los intereses de los zimbabuenses" por delante de los suyos propios. "Trabajo con la idea de que el acuerdo funcione para que dentro de 18 meses se puedan celebrar unas elecciones libres y justas", incluso si para ello es necesario "tener una relación con el diablo", explicó.

El jefe de Gobierno manifestó su esperanza de devolver la esperanza y la seguridad a su pueblo, de convertir de nuevo a Zimbabue en "uno de los países cruciales de África" y de que "resuelva sus conflictos de forma pacífica".

Durante su visita a Madrid, Tsvangirai recibirá el Premio Internacional a una trayectoria humana que este año le concede la Fundación Cristóbal Gabarrón, y mañana se reunirá con el ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, según informó el Ministerio en un comunicado.