ESTAMBUL, 27 May. (DPA/EP) -
El Ministerio turco de Asuntos Exteriores ha criticado al Gobierno alemán este sábado por permitir que se celebrase una manifestación con presencia kurda en la ciudad de Colonia, alegando que las autoridades alemanas aplican un "doble rasero", haciendo referencia a la prohibición de la celebración de un evento por el partido del Gobierno turco.
"Este enfoque de doble rasero, el cual condenamos de sobremanera, no es adecuado con los valores democráticos, ni con la lucha contra el terrorismo o con las expectativas de normalización de las relaciones entre Turquía y Rusia", ha asegurado el Ministerio a través de un comunicado en su página web.
Por su parte, las autoridades alemanas han explicado que la manifestación que han autorizado, en la que participaban varias asociaciones kurdas, era para protestar por las operaciones militares de Turquía en Siria.
También han añadido que han prohibido a dos líderes opositores del partido pro kurdo Partido del Pueblo Democrático (HDP, por sus siglas en turco) que hablen en público tras la marcha organizada, ya que el Gobierno alemán cuenta con una normativa que prohíbe que políticos extranjeros puedan hablar en público cuando se acercan las elecciones en sus países de origen.
Supuestamente, los políticos kurdos que iban a dar un discurso eran Ahmet Yildirim y Tugba Hezer. Hezer está en búsqueda y captura en Turquía, acusado de terrorismo por su supuestos vínculos con el Partido de Trabajadores del Kurdistán (PKK).
"Los gobiernos en Europa que permiten al HDP, los portavoces de la organización terrorista PKK hablar en público, no permiten al partido de nuestro Gobierno que tenga un asiento en las mismas plazas públicas que ellos", ha criticado el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, durante la celebración de un mítin en la provincia de Erzurum.
Al tener prohibido celebrar actos políticos en la mayor parte de los países europeos, Erdogan protagonizó un mítin de su partido, el AKP, la semana pasada en la capital bosnia de Sarajevo.
Turquía celebrará sus elecciones parlamentarias y presidenciales el próximo 24 de junio. Las tensiones entre Alemania y Ankara surgieron el año pasado, después de que el Gobierno alemán impidiera a varios políticos turcos dar discursos en una serie de eventos políticos convocados a raíz del referéndum constitucional de Turquía.
