CAEN, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, subrayó hoy que comparte con el presidente estadounidense Barack Obama el mismo objetivo de que Turquía juegue un papel de "pasarela" entre Oriente y Occidente pero admitió que sigue habiendo una diferencia "en las modalidades" con respecto a su homólogo norteamericano.
"La posición tradicional de Estados Unidos es la integración. La mía, ustedes la conocen, no es la integración en la Unión Europea", dijo durante una rueda de prensa ofrecida en la Prefectura de Caen tras mantener una reunión con Obama, invitado a los actos del 65 Aniversario del Desembarco de Normandía.
Así pues, Sarkozy reiteró que en el caso de Turquía su propuesta es la creación de un espacio económico y de seguridad cómun. "Tenemos una diferencia sobre las modalidades, pero no la tenemos sobre los objetivos: hacer de Turquía un elemento de puente entre Oriente y Occidente", resumió.
Además, resaltó la importancia que a su juicio tiene que Europa "tenga fronteras" porque es "un elemento de estabilización del mundo". "Y no puedo dejar destruir este elemento de estabilización", remachó.
"Eso no significa que haya que empujar a Turquía a las tinieblas. Turquía es un aliado en la OTAN, es una pasarela entre dos mundos", matizó.
ELOGIO DEL DISCURSO DE EL CAIRO
Por otro lado, Sarkozy elogió el discurso sobre las relaciones con el Islam pronunciado por el presidente Obama en El Cairo, que calificó de "sobresaliente" porque "hacía tiempo que esperábamos", dijo, que Estados Unidos asuma toda su responsabilidad para evitar el choque de culturas entre Occidente y Oriente". Así pues, se mostró "completamente de acuerdo" con las palabras de Obama e incluso con la cuestión del uso del velo islámico.
Al respecto, precisó que en Francia cualquier joven que quiera llevarlo puede hacerlo porque tiene esa libertad, pero que existen "límites" porque Francia es un estado laico. El primero es que en las ventanillas de la Administración los funcionarios "no tienen que mostrar signos visibles de su pertenencia religiosa", sea cual sea.
El segundo es que el hecho de que las jóvenes musulmanas lleven velo no plantea ningún problema a condición de que sea una decisión personal "libremente elegida y no resultado de una obligación de su familia o entorno". "Francia es un país donde todos pueden vivir sus convicciones, pero se respeta a la mujer y su autonomía", aclaró.
