MADRID, 30 Sep. (EUROPA PRESS) -
El director general de Vivienda y Rehabilitación de la Comunidad de Madrid, Juan Van Halen Rodríguez, calificó hoy de "involucionista" y "poco flexible" el Plan de Vivienda 2009-2012, presentado hoy por la ministra del ramo, Beatriz Corredor, a los consejeros de la misma cartera de todas las comunidades autónomas en el Consejo sectorial que se celebra hoy en sede ministerial.
Van Halen señaló que la reunión es "más de lo mismo" que la desarrollada la semana pasada, en la que participaron sólo los directores generales de las comunidades, y sigue "sin avance". Así, criticó que el Ministerio de Vivienda "se enroca en posiciones involucionistas", como el registro de demandantes para vivienda protegida y la calificación permanente de suelo protegido de las viviendas, "que son pocos flexibles y nada buenos en estos momentos de incertidumbre y de crisis económica".
Antes del verano, Corredor, "presentó un borrador del Plan Estatal de Mínimos, donde se establecían las líneas generales y donde cada comunidad autónoma podría desarrollarlo en su territorio según sus necesidades", dijo Van Halen. Esta propuesta entusiasmó a los responsables autonómicos de Vivienda, al contrario que la llevada posteriormente a la mesa por el gabinete de Corredor.
"El Gobierno nos planteó un sistema nuevo en el que las comunidades autónomas íbamos a tener mucho que decir en el diseño de Plan de vivienda, mientras que el Ministerio se iba a limitar a fijar las condiciones de financiación. La música sonaba muy bien pero la letra nos gusta mucho menos porque con el pretexto de la financiación se nos imponen modelos como el registro de demandantes o la calificación de viviendas de por vida cuando sea suelo protegido, que creemos que desincentiva la producción de viviendas en el mercado", explicó el director regional.
La vivienda protegida se encuentra sujeta a limitaciones durante un número de años cuya potestad para determinarlos corresponde a las comunidades. En Madrid se puede descalificar a los 15 años. Ahora, el Ministerio de Vivienda propone que el inmueble protegido ubicado en suelo privado se descalifique a los 30 años, mientras que las que se sitúan en suelo protegido no se descalificarían nunca.
Otro de los puntos que ha creado polémica es el de la creación de un registro de demandantes, es decir, un listado en el que se encuentren todas las personas que quieren adquirir una vivienda protegida. Para la Comunidad esto supone "una política intervencionista clara", ya que, si un promotor privado cumple los requisitos legales y los ciudadanos también, "el Estado no tiene porqué intervenir en ello".
El director general de Vivienda aseguró que no existe un "consenso amplio" entre todas las comunidades autónomas y que Madrid no es la única que no le gustan los planteamientos de Corredor. "Hay algunas de otras autonomías de otros colores políticos disconformes con estos dos puntos de fricción".
En cuanto a las ayudas de viviendas, Van Halen manifestó que todavía no se han fijados los números y los límites, aunque apuntó que el Ministerio va a elevar los límites para solicitarlas del 3,5 del salario mínimo interprofesional al 4,5, "cuando en Madrid ya está al 5,25 y existe además un tipo de vivienda de precio limitado que eleva un poco más estos límites de ingresos y los precios para un sector incardinado en las rentas medias".
La propuesta de la Comunidad es que el Ministerio tome nota de los modelos que funcionan en la región. Así, Van Halen apuntó que el plan regional es "flexible" y permite conciliar el interés de los que tienen que hacer las viviendas y los que tienen que adquirirlas. "No se puede pretender hacer las viviendas por ley y todo lo que cree incertidumbre; eso es muy peligroso", apuntó.
Por último, indicó que en la reunión, "que es parte de la propaganda", el Ministerio todavía no ha hablado de financiación y criticó que Madrid recibe menos de dos de cada 10 euros, "mientras que otras comunidades reciben más".
