Duran ve "partidaria" la polémica Gobierno-obispos y cree que Zapatero busca "tranquilizar" a sus votantes laicistas

Actualizado: miércoles, 9 enero 2008 15:16

MADRID, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -

El portavoz de CiU en el Congreso y líder de Uniò, Josep Antoni Duran i Lleida, considera que, con su respuesta a los obispos que han criticado algunas de las leyes impulsadas por su Gabinete, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, busca "tranquilizar" a sus votantes más izquierdistas y laicistas después de haber llegado al final de la legislatura sin haber modificado el Concordato con la Santa Sede, que regula las relaciones entre Iglesia y Estado.

En una rueda de prensa en la Cámara Baja, el político democristiano rehusó entrar en el fondo de la polémica generada entre el Gobierno, el PSOE y los obispos tras la concentración en favor de el familia tradicional celebrada el pasado 30 de diciembre en Madrid.

Duran, quien alegó que este enfrentamiento tiene un tinte "partidario", insistió en que la Jerarquía Eclesiástica tiene la "libertad", el "derecho" y en algunos casos incluso "la obligación" de opinar sobre lo que estime conveniente, porque representa a una "parte importante de la comunidad que vive en la sociedad española".

"La Iglesia tiene derecho a opinar y allá con sus opiniones", apuntó. Partiendo de esta premisa, cree que el Gobierno tiene que "aguantar las críticas" y responder a los obispos como considere conveniente.

OBISPOS IDENTIFICADOS CON UNA OPCIÓN POLÍTICA.

Eso sí, volvió a advertir de que "algún miembro de la Iglesia" corre el riesgo de que sus posiciones se identifiquen con "alguna opción política", en referencia al PP. También dijo no entender que cuando la jerarquía católica se opuso a la guerra de Irak, la izquierda la "aplaudiera" y ahora que no comparte sus reflexiones se dedique a atacarla.

Pero Duran dejó claro que no iba a entrar en el debate sobre las relaciones entre la Iglesia y el Gobierno porque están reguladas por una ley que, destacó, el Ejecutivo socialista "no tiene intención de modificar".

Según su análisis, la réplica de Zapatero a los obispos no es más que un "brindis al sol" que ahora porque "necesita tener tranquilo" a su electorado más izquierdista y más laicista. En opinión de Duran, el presidente del Gobierno "no va a modificar nada del estatus respecto a la Iglesia", pero quiere evitar que se le "escapen votos" por ejemplo hacia Izquierda Unida, que representa "más claramente esa posición laicista y de confrontación" con los obispos.