La mujer agredida por su marido en Ourense permanece en la Unidad de Quemados de Povisa de Vigo en estado "menos grave"

Actualizado: martes, 22 enero 2008 19:06


VIGO/OURENSE, 22 Ene. (EUROPA PRESS) -

La mujer de 52 años de edad, Celia N.F., quemada hoy supuestamente por su marido en Ourense, permanece ingresada en la Unidad de Quemados del Policlínico Povisa de Vigo, y su estado es "menos grave", según confirmaron a Europa Press fuentes del centro médico.

Las mismas fuentes explicaron que la última exploración realizada a la mujer, que ingresó en este centro procedente del Complexo Hospitalario de Ourense, evidencia quemaduras de segundo grado en el 10 por ciento del cuerpo, con afectación en los hombros, los brazos y el lado derecho de la cara, aunque en momentos iniciales el examen apuntaba a que la superficie afectada podía ser mayor.

Los hechos ocurrieron a primera hora de la mañana de hoy en el número 5 de la plaza 500 del barrio ourensano de Barrocanes, donde la mujer fue agredida por su marido, Arturo M.L., de 58 años de edad, quien supuestamente le prendió fuego y que, pese a haber sido denunciado por su pareja en 2001, no contaba en la actualidad con ninguna orden de alejamiento.

La Policía, que lo detuvo una media hora después de los hechos sin que el hombre opusiera resistencia, investiga si el detenido roció con un aerosol u otro líquido inflamable a su mujer. Los agentes lo encontraron en pijama y descalzo, mientras que la víctima se había refugiado en la casa de una vecina.

DISCUSIONES "HABITUALES"

La principal hipótesis de la Policía Nacional se basa en que el marido le prendió fuego tras arrojarle un líquido inflamable. Mientras tanto, Arturo M.L., a quien le imputan un presunto delito de homicidio en grado de tentativa, permanece en la Comisaría de Ourense a la espera de pasar mañana a disposición judicial.

Vecinos del barrio de Barrocanes, que pidieron mantener su anonimato, aseguraron a Europa Press que eran "habituales" las discusiones entre la pareja y relataron episodios como cuando el marido rompió a pedradas cristales de la vivienda porque la víctima no lo dejaba entrar.

Otra vecina confesó a Europa Press Televisión que no estaba sorprendida, sino que "lo extraño es que no pasase antes", ya que "la insultaba constantemente y eran continuos los malos tratos y las situaciones de violencia".