La nube volcánica impide que helicópteros y cazas puedan volar en el mayor entrenamiento anual de la OTAN en el mar

Actualizado: lunes, 19 abril 2010 21:54

MADRID, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -

La nube generada por un volcán islandés ha provocado la anulación durante dos días de las operaciones de los helicópteros, aviones de vigilancia marítima y cazabombarderos navales que tenían previsto participar en aguas de Baleares en el ejercicio 'Brilliant Mariner', las mayores maniobras anuales de preparación de la Fuerza de Reacción Rápida de la OTAN (NRF, en sus siglas en ingles), lideradas en esta ocasión por el Grupo de Combate del portaaeronaves de la Marina francesa Charles de Gaulle, en el que se integra la fragata de la Armada española Blas de Lezo F103, informaron fuentes de la Marina.

"El ejercicio está siendo muy afectado por la nube procedente de Islandia porque las operaciones aéreas han tenido que ser suspendidas durante dos días", subrayaron las citadas fuentes, tras relatar la importancia de este entrenamiento en alta mar para la considerada como fuerza de élite aliada, con capacidad para desplegarse en cuestión de días en cualquier punto del mundo con autonomía.

Las mismas fuentes anunciaron además que la Armada española liderará en el segundo semestre de 2011 el componente naval de la NRF, con una fragata F100 en el Grupo de Combate. También destacaron la importancia de los ejercicios de la Alianza Atlántica en el mar y la destacada participación de la Marina, que el pasado 10 de marzo consiguió alertar de la presencia de material militar no autorizado en un buque carguero civil gracias a los sistemas del submarino Sirocco.

La Armada celebró este lunes en su Cuartel General su primera sesión informativa para periodistas responsables de Política de Defensa, organizada por su Departamento de Comunicación. El foro contó con la participación de los responsables de las tres divisiones más importantes del Estado Mayor de la Marina, así como la mayoría de informadores encargados de este área.

En la jornada, el Estado Mayor de la Armada anunció que en los próximos meses tiene previsto desplegar un vehículo aéreo no tripulado (UAV) tipo helicóptero a bordo de la fragata española que participa en la misión de la Unión Europea de lucha contra la piratería en aguas de Somalia, con la misión principal de detectar y vigilar movimientos de corsarios dispuestos a atacar a cargueros y pesqueros que navegan por la zona.

El primer helicóptero espía sin piloto de las Fuerzas Armadas españolas se incorporará al Arma Aérea de la Marina española y será contratado por un importe de unos ocho millones de euros en régimen de 'leasing'. Posteriormente, se adquirirán más unidades de este sistema de armas, con el objetivo de crear una unidad de UAV navales dentro del Arma Aérea de la Marina, actualmente liderada por los cazas de aterrizaje y despegue vertical Harrier y los helicópteros de guerra antisubmarina Sea Hawk.

Las mismas fuentes explicaron que el Ministerio de Defensa está ultimando el proceso de selección del modelo de UAV naval, que concluirá "en los próximos meses", y que el aparato se desplegará en un breve periodo con el contingente de la Armada destacado en aguas de Somalia para luchar contra la piratería.

EL HELICÓPTERO SIN PILOTO, UNA VIEJA ASPIRACIÓN DE LA ARMADA

La adquisición de un sistema de vehículos aéreos no tripulados de ala rotatoria (helicópteros espía sin piloto) es una aspiración de la Armada desde hace varios años y constaba en diversos proyectos de futuro, principalmente en los elaborados por el anterior jefe de Estado Mayor de la Armada (AJEMA), el almirante general Sebastián Zaragoza, secundado entonces por el almirante Manuel Rebollo, actual jefe de la Marina.

Desde el año 2006, la Marina ha manifestado en determinados foros y en el ámbito del Ministerio de Defensa su deseo de incorporar un UAV naval y, especialmente, uno con las características que ya ha demostrado en misiones el Fire Scout, desarrollado por la estadounidense Northrop Grumman y contratado por la US Navy.

Este helicóptero de pequeñas dimensiones está diseñado para realizar misiones de reconocimiento, vigilancia y detección de objetivos de guerra y tiene una autonomía de cuatro a seis horas de aeronavegación.

Según datos de la compañía estadounidense consultados por Europa Press, el Fire Scout está dotado con sensores electroópticos e infrarrojos e incorpora dos lanzadores de misiles guiados por dispositivos láser, probados con éxito en julio de 2005, y tiene un peso de 1.161 kilogramos.

El 'Fire Scout' es un instrumento idóneo para revisar zonas marítimas y terrestres antes de proceder a desembarcar fuerzas anfibias, como infantes del Cuerpo de Marina de la Armada. Con esta aeronave, la Armada española vería incrementada la capacidad operativa de sus buques de escolta más avanzados, las fragatas F-100 dotadas del sistema de combate AEGIS.