Denegado el indulto al ex alguacil de Villalón (Valladolid), condenado a siete años por abusar de una limpiadora

Actualizado: miércoles, 13 enero 2010 19:36

VALLADOLID, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -

El alguacil de Villalón de Campos (Valladolid), Manuel G. del A, condenado en 2007 a siete años de cárcel como autor de sendos delitos de agresión sexual y abuso sexual sobre una empleada del servicio municipal de limpieza, pena que empezó a cumplir en febrero de 2009, agotó la última posibilidad que tenía de lograr su excarcelación, después de que viera denegado el indulto que había solicitado.

Dicha petición había sido elevada al Ministerio de Justicia, si bien el departamento que dirige Francisco Caamaño notificó recientemente a la Sección Segunda de lo Penal de la Audiencia de Valladolid que el Consejo de Ministros, en su reunión de fecha 23 de diciembre del pasado año, acordó no considerar oportuno la concesión del indulto, según informaron a Europa Press fuentes jurídicas.

El alguacil, cuya sentencia ratificó a finales de 2008 el Tribunal Supremo, ingresó voluntariamente en el Centro Penitenciario de Valladolid el día 4 de febrero de 2009 para cumplir la condena. El posterior recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional fue inadmitido en mayo del pasado año.

Su condena incluye siete años de cárcel y su inhabilitación durante ese periodo para el ejercicio de empleo o cargo público, además del pago de una indemnización de 12.000 euros en favor de la víctima.

REPERCUSIÓN POLÍTICA

El caso del alguacil de Villalón costó también el puesto de alcalde de la localidad al popular Javier Mazariegos por haber pedido para el primero el indulto y, además, por haber realizado en su favor determinadas declaraciones en las que arremetió contra la Ley de Violencia de Género y la sobreprotección que, a su juicio, tenían las mujeres.

Los hechos por los que fue condenado Manuel G. del A. se remontan al año 1997, que fue cuando la víctima, M.L.D.S.P, empleada del servicio de limpieza en el Ayuntamiento de Villalón de Campos (Valladolid), comenzó a recibir del acusado requerimientos de índole sexual, tales como poner películas pornográficas mientras ella limpiaba la biblioteca.

En ese contexto, el condenado se bajó en ocasiones los pantalones y se masturbó en presencia de la trabajadora, a la que solicitó que se dejara sodomizar y propuso mantener relaciones sexuales en la oficina del piso superior, bajo la amenaza de hacer lo posible con echarla del trabajo si decía algo.

En uno de estos episodios, en noviembre de 2002, la trabajadora mantuvo que mientras limpiaba el sótano el alguacil se presentó con el pene fuera y tras soltarle "¡me cago en Dios, que me la chupes!", la acorraló y la introdujo a la fuerza el miembro en la boca hasta eyacular.

Quince días después, a finales de ese mismo año, la víctima se hallaba limpiando la oficina de Cruz Roja sita en el piso superior del Consistorio, momento en que el alguacil la introdujo en el baño, le bajó los pantalones y se masturbó eyaculando entre sus piernas, al no acceder ella a la solicitud de que se la chupara ni lograr penetrarla, pese a intentarlo, ya que se resistió.

Además, la limpiadora acusó a su superior jerárquico de haberla amenazado en diciembre de 2002 con lanzarla por la ventana cuando se encontraba subida a una escalera realizando su trabajo.

Las acusaciones pública y privada habían solicitado una pena global de 14 años de cárcel para el funcionario, y tan sólo discreparon en el capítulo indemnizatorio, ya que el fiscal solicitó 12.000 en favor de la víctima y la acusación particular 30.000 euros, mientras que el defensor del imputado solicitó una sentencia absolutoria.