Actualizado 07/11/2014 18:25

Fundación CajaSur inaugura en el Palacio de Viana la exposición 'Teno escultor y orfebre'

Cañadilla (centro), junto al resto de autoridades y familiares de Teno
EUROPA PRESS/CAJASUR

CÓRDOBA, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -

El director de la Fundación CajaSur, Ángel Cañadilla; el comisario de la exposición del Año Teno, Cristóbal Cordero, y la hija del artista y miembro de la comisión organizadora, Monica Teno, han presentado e inaugurado este viernes en el Palacio de Viana la exposición 'Teno escultor y orfebre'.

Esta muestra, con la que finaliza el citado Año Teno, es probablemente la más esperada, en opinión de los organizadores, por la riqueza y calidad artística expuesta, ya que están representados los temas más recurrentes y sentidos por el artista, ejecutados de forma magistral dentro de su personal expresionismo, con materiales diversos y con una técnica novedosa e insuperable

'Teno escultor y orfebre', que permanecerá abierta al público hasta el próximo 8 de diciembre, de martes a sábado en horario de 10,00 a 19,00 horas, y los domingos y festivos de 10,00 a 15,00 horas, muestra, en los 12 patios que conformar el Palacio de Viana, 44 obras de escultura y orfebrería del genial artista. El acceso a la exposición está incluido en la visita a los patios (cinco euros).

Según ha explicado Ángel Cañadilla, "con esta muestra se cierra el ciclo de exposiciones dedicadas al genial y universal artista, a través de una colección espléndida de obras que por sí sola constituye un lujo para los sentidos. Desde la Fundación CajaSur queremos preservar para la posterioridad la memoria de Aurelio Teno".

Las obras seleccionadas por el comité organizador incluyen las esculturas de Teno talladas en madera (1986-1988), que están imbuidas del Teno más primitivo e indomable, con iconografías totémicas, rozando el esperpento, toscas y abiertas, mostrando una figuración desgarrada y bárbara, adaptando formas dinámicas al rudo tronco, a veces reciclado.

La policromía agresiva y fuerte está ejecutada con colores puros, con aplicaciones y bandas decorativas que nos traen recuerdos indígenas de la América pre-colombina y de África. En este contexto se expone también 'El grito' (hacia 1986), que refleja toda la amargura y dramatismo producido por el terrorismo contemporáneo; es una llamada de atención, una protesta que nos hace el artista libertario y rebelde, siempre preocupado por lo que se cuece a su alrededor. Su fuerza estética enlaza directamente con 'El Grito' de Munch o el 'Guernica' de Picasso.

Anteriores son las princesas 'Charrúa', 'Olmeca', 'Inca', 'Maya', 'Apache' y 'Guaraní' con el protagonismo de la plata, el esmalte y los minerales (1978). Fueron realizadas en homenaje a las grandes culturas de la América pre-colombina. Los seis bellos rostros de las mujeres indígenas están modelados en plata, cuyos bustos emergen de finos mármoles ornamentados con resplandecientes minerales y esmaltes, constituyendo una clara manifestación de la poética expresionista de Aurelio Teno.

Por otro lado, se pueden ver los 'Quijotes I, II, III, IV, V y VI', igualmente en plata, esmalte y minerales (1977-79). Son un conjunto de seis caras de plata repujada, fusionadas con los minerales y esmaltes, que ostentan toda la grandeza y la seña de identidad del artista en el mundo del arte. Con expresivos gestos, ojos y bocas abiertas, nos transmiten, entre cuarzos y amatistas, la humanidad y amargura del personaje cervantino tratando de lograr el sueño imposible.

Junto a ellos están las nueve 'Águilas' y el 'Búho' (1979-1990). Poderosas piezas, en plata, esmalte y minerales, plenas de efectos mágicos, que engrandecen la colección por su incomparable belleza, originada por el virtuosismo del repujado esmaltado en cabezas, plumas y garras. Verdaderos emblemas de Teno, mitad ángeles y mitad dioses, llenos de vitalidad en dinámica tensión, enriquecidos por la brillantez y el color de la plata y los diversos minerales.

Por último, en la muestra tambié están las joyas diseñadas por Teno, en oro, plata, piedras preciosas y otros materiales (1970) y a las que se puede considera como miniaturas escultóricas, estando íntimamente relacionadas con la escultura a mayor escala, elaboradas con la misma pasión y expresividad. Para Teno no son simples adornos o complementos, sino verdaderas obras de arte, con igual concepto escultórico y ritmo espacial.

Los colgantes, gargantillas, broches y sortijas son las piezas más apreciadas y exclusivas en la joyería de Teno, cuyos diseños armonizan con sabiduría la figuración expresionista y el dinamismo a través de los metales labrados y el color de las gemas. Destacan también los collares inspirados en los ornamentos étnicos de las tribus afroamericanas.