LA RÁBIDA (HUELVA), 22 Jul. (EUROPA PRESS) -
El científico del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) Santos Cirujano Bracamonte aseguró hoy que las zonas húmedas de España están en unas condiciones tan "deplorables" que "los ríos parecen cloacas", como resultado del impacto negativo de la acción humana.
En declaraciones a Europa Press, el científico expresó que el principal problema actual es que el agua es un bien escaso de poca calidad, "situación que se agrava por momentos si se tiene en cuenta que "en zonas como Matalascañas cada vez hay una mayor demanda de agua porque cada vez vive más gente".
"Debemos replantearnos que el desarrollo sostenible no implica continuar este proceso de expansión sin límites, sino que hay que saber hasta donde se debe llegar, a lo mejor la solución es dejar de crecer", comentó Cirujano.
Así, en muchas ocasiones, las autoridades "deben elegir" entre seguir potenciando nuevas zonas de cultivo o apostar por la conservación de los humedales, porque ambas actividades "están reñidas" en tanto que los productos agrícolas producen un gran perjuicio a la calidad del agua, dijo.
Los políticos "sólo hablan de conservación cuando les interesa", porque la mayoría de las veces no se toman medidas "por miedo a que la gente se eche a la calle" reclamando una posible "pérdida de puestos de trabajo" como consecuencia del control de actividades como la agricultura o el pastoreo, "cuando zonas como la de Doñana generan miles de euros al año", apostilló el científico.
En este sentido, Cirujano explicó que los retos que tienen los gobiernos, como complemento a la financiación de investigaciones en la materia, pasan por "educar y concienciar" a los ciudadanos acerca del valor de los ecosistemas y por que seamos capaces de compartir el agua de manera culta y razonable".
Santos Cirujano participó hoy en el curso 'Gestión sostenible de las zonas húmedas' dentro del marco de la Universidad Internacional de Andalucía, sensibilizando a los alumnos sobre la necesidad de comenzar "ya a actuar" de manera contundente en este campo para que en 2015 "se hayan cumplido los objetivos de conservación decretados por la Directiva Marco del Agua de la Unión Europea".
