HUELVA, 6 Abr. (EUROPA PRESS) -
La dirección de la prisión provincial de Huelva hizo hoy un llamamiento a la "tranquilidad" y negó que existiese un reciente caso de legionella entre la población de reclusos, aunque admitió que en el mes de enero se registró un posible "caso aislado" que no fue confirmado, sin que se haya producido ningún otro.
En un comunicado remitido a Europa Press, la Subdelegación del Gobierno reconoció que en el pasado mes de enero se registró un caso "aislado" de legionella en la prisión provincial, aunque hasta el momento "no se ha vuelto a dar ningún otro" mientras éste no fue confirmado por los médicos.
En ese sentido, aclaró que el enfermo al que se refiere la denuncia pública sindicato CSI-CSIF ingresó en el hospital Infanta Elena con un cuadro de neumonía y el primer informe médico apuntaba "la posibilidad de que pudiera haberse producido a raíz de un contagio por legionella", extremo que no se ha confirmado finalmente mientras el recluso en cuestión, que no ha tenido que ser hospitalizado, se encuentra en su celda con normalidad.
Con todo, la dirección del centro penitenciario, en prevención, para más seguridad y con buen criterio, pidió que se reuniera el Comité de Salud Laboral para actuar en consecuencia, a pesar de la confirmación de que el caso no era de legionella. Así, inspectores sanitarios realizaron un examen concreto y específico en la celda del citado recluso y en otros departamentos para determinar posibles causas. Los resultados de esta inspección no arrojan, en principio, riesgos de ninguna clase. En cuanto a la instalación del agua, la dirección del centro elevó a la Dirección General de Instituciones Penitenciarias en enero, después de detectarse ese caso aislado, la conveniencia de prever en el futuro liberar una partida para mejorar los conductos, una petición que no se tramitó por vía de urgencia porque no se considera la misma.
