HUELVA, 28 May. (EUROPA PRESS) -
El PSOE de Huelva apostó hoy por un acuerdo de cinco años para el cese de vertidos de fosfoyesos y dos para la restauración de la zona de Marismas de Mendaña en cumplimiento de la sentencia sobre Fertiberia, para el que pidió "responsabilidad" a la empresa y a los representantes de los trabajadores, de los que consideró que están "despistados y desorientados".
En rueda de prensa, el secretario de Organización del PSOE de Huelva, Mario Jiménez, consideró que, "frente a las demagogias baratas y el fundamentalismo ecologista, este acuerdo puede posibilitar la preservación del medio ambiente, el cumplimiento de la sentencia de la Audiencia Nacional que considera caducada la licencia para el depósito de fosfoyesos de Fertiberia y el mantenimiento del empleo de unas 700 familias onubenses".
En este sentido, lamentó la actitud mantenida por Fertiberia, que, según explicó, "ha tenido tiempo para atender los requerimientos que la Dirección General de Costas le ha hecho hasta en tres ocasiones para que presentara un plan de cierre y no lo ha hecho, sino que ha planteado esto como si la empresa fuera una mercería que se cierra sin más y esto no puede ser", y añadió que "también ha optado últimamente por una estrategia de crispación en la opinión pública que no ayuda a una solución".
A su juicio, "hay una estrategia premeditada contra el empleo industrial", por lo que pidió a la empresa "seriedad y que atienda al requerimiento de las administraciones sin alterar el escenario en que debe darse un acuerdo", tras lo que le advirtió que "de rositas no se va a ir nadie".
Jiménez insistió en que el PSOE "apuesta por una solución consensuada en la que impere la serenidad y la tranquilidad y en la que Costas, la Consejería de Medio Ambiente, la empresa y los representantes de los trabajadores establezcan un calendario con lo que se tiene que hacer y en el tiempo que se hará para que se cumpla la sentencia de la mejor forma posible, garantizando el interés general de tener un medio ambiente equilibrado y el mantenimiento del empleo".
Por ello, indicó que con la notificación del cese de vertidos y la restauración de la zona en 2011, que aseguraron los sindicatos, Costas "sólo quería recordar la sentencia que lleva a la caducidad de la concesión administrativa para el depósito de fosfoyesos, pero no le corresponde en exclusiva la materialización de esa sentencia", sobre la que consideró que, "si todo el mundo rema en la misma dirección, se logrará un acuerdo entre las administraciones y la empresa, siempre que ésta abandone su irresponsabilidad y asuma que estamos en un Estado de Derecho en el que las sentencias se cumplen".
PLAN INDUSTRIAL.
De la misma forma, recordó que, para el mantenimiento del empleo industrial onubense, el PSOE está "trabajando con las consejerías de Industria y Medio Ambiente y con el Ministerio de Industria para establecer un plan que permita la reubicación de lo que sea reubicable en las plantas y los trabajadores y la puesta en marcha de nuevas empresas de base industrial".
Así, indicó que en estos momentos se están llevando a cabo los trabajados de diagnóstico para "ver en qué situación se encuentra cada empresa y en los que están trabajando sindicatos, empresas y administraciones públicas", entre las que apuntó que "no está el Ayuntamiento de Huelva, que no ha aportado nada".
Jiménez criticó que el PP "no tiene un plan para garantizar el empleo o la actividad económica de la ciudad, mientras pone en peligro a 700 familias por su estrategia de especulación inmobiliaria en la que le estorba la Avenida Francisco Montenegro porque sólo ve parcelas en ella, como ya demostró con la central de ciclo combinado de Endesa, cuya gestión va a costar a los ciudadanos siete millones de euros".
Por ello, consideró "inasumible, indolente e irresponsable la actitud del PP y del alcalde, Pedro Rodríguez, que son promotores de la situación en la que se encuentra Fertiberia porque fue el Gobierno del PP el que en 2003 instó al expediente de caducidad de la empresa como parte de su estrategia de presión a la Avenida Francisco Montenegro, financiando aventuras de la opinión pública como la Mesa de la Ría con el objetivo de convertir una zona de producción en parcelas urbanísticas".
En este tema, también lamentó la "inexplicable" actitud de una "fuerza de izquierdas" como IU, de la que aseguró que "ha decidido una estrategia con el PP y pone en peligro de forma inmediata y sin solución el salario de 700 familias", con lo que concluyó que, "si no es capaz de defender los intereses de los trabajadores, no extraña que esté como está, sin norte y siendo un fiel siervo de las estrategias especulativas del PP, dispuesto, por un puñado de beneficios políticos, entregar la cuchara de la dignidad política aunque esto signifique echar a 700 familias a la calle".
