ALMONTE (HUELVA), 19 Ago. (EUROPA PRESS) -
El obispo de Huelva, Santiago Gómez Sierra, ha presidido este miércoles la Solemne Función Votiva en la parroquia de la Asunción de Almonte (Huelva) en cuyo altar mayor se encuentra Virgen del Rocío, patrona de Almonte, que lucía de Pastora. Con esta misa y la posterior Procesión Eucarística por el interior del Templo se ha celebrado un Rocío Chico diferente debido a la pandemia del Covid-19.
Así, junto al obispo, el párroco y rector del Santuario del Rocío, Francisco J. Martín Sirgo, y el vicario parroquial, José Antonio Calvo Millán, han concelebrado la Santa Misa a la que han acudido numerosas autoridades, la junta de la Hermandad Matriz, los anteriores presidentes de dicha hermandad y fieles y devotos que han participado de este momento tan señalado en el calendario almonteño, según ha indicado el Obispado en nota de prensa.
A la conclusión de la misa, y ante la imposibilidad de procesionar con el Santísimo, Santiago Gómez, con la Custodia en sus manos, se ha dirigido hasta la puerta principal del templo parroquial para bendecir a todo el pueblo almonteño, muchos de ellos en la plaza ante la limitación de aforo debido al Covid-19.
La Virgen del Rocío se encuentra desde el mes de agosto de 2019 en la localidad almonteña tras su traslado habitual cada siete años desde la aldea, lo que ha motivado que esta celebración haya sido diferente a la de otros añosa ya que los actos y cultos, que comenzaron el pasado domingo, se han llevado a cabo con limitación de aforo, pantallas y megafonía para intentar, pese a las restricciones impuestas por el covid-19, llegar al máximo posible de personas.
La convocatoria de cultos del Rocío Chico se hace para conmemorar el voto de acción de gracias que los almonteños hicieron en 1813 a la Virgen del Rocío por liberar al pueblo de la represión de las tropas francesas de Napoleón, que cumple 207 años. La última vez que se celebró esta festividad en la localidad fue en 1963, cuando se trasladó a la Virgen con motivo del inicio de las obras del actual Santuario del Rocío.
Esta celebración, cuya fecha, a diferencia de la romería, es inamovible, se celebra siempre en agosto cumpliendo así con esa promesa que Almonte hizo a su patrona de pasar la madrugada del 18 al 19 de agosto junto a ella y celebrar una misa en recuerdo de los hechos acaecidos en la villa en 1810.
Los cultos no se han celebrado a puerta cerrada pero sí con el aforo limitado de la Parroquia de la Asunción, que es de 150 personas. Además, durante el triduo no ha habido coros invitados y el acompañamiento musical ha estado a cargo de la escuela de tamborileros de la Hermandad Matriz.
Además, el domingo se inauguró la placa conmemorativa de la visita en febrero de los Reyes, que coincidió con el centenario de la concesión del título de real a la Hermandad Matriz de Almonte por su majestad el Rey Alfonso XIII en el año 1920.
Por otra parte, el rezo del santo rosario en la media noche del 18 al 19 de agosto se ha realizado en el interior de la Parroquia de la Asunción y ha sido cantado por los componentes del antiguo Coro de la Hermandad Matriz y se ha podido seguir por megafonía tanto en Almonte como en El Rocío.
Los cultos de este Rocío Chico marcado por la pandemia del Covid-19 han finalizado con la procesión eucarística por el interior del templo parroquial.
