HUELVA, 7 Nov. (EUROPA PRESS) -
Agentes del Equipo del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), con base en Niebla y pertenecientes a la Comandancia de la Guardia Civil de Huelva, han procedido a la imputación de un delito contra la flora y fauna silvestre a un Guarda Particular de Campo, tras ser sorprendido mientras practicaba caza furtiva.
En un comunicado, el Instituto Armado informó de que los hechos tuvieron lugar el 3 de noviembre como consecuencia de los servicios montados por el Seprona en prevención de actividades furtivas en la zona de El Condado. Concretamente éste se desarrolló en el coto de caza 'La Borrachuela', donde se tenían certezas de que era frecuentado por cazadores furtivos.
Desde primeras horas de la tarde, los agentes permanecieron en los alrededores, ocultos entre la maleza mientras esperaban que pudieran llegar los furtivos. Cuando empezó a oscurecer, aparecieron el imputado y otro individuo que le acompañaba, ocultándose en un pozo desde donde tenían previsto realizar los disparos. Antes, habían cebado el terreno con maíz, al objeto de atraerse las piezas hasta un lugar en que el disparo fuera certero.
Con los cazadores escondidos, los agentes, que permanecían ocultos tan solo a unos metros de ellos, cerraron el dispositivo y les conminaron a que salieran del pozo y entregaran el arma que portaban.
El portador del arma, una escopeta del calibre doce que fue intervenida, resultó ser un vecino de Bonares, el cual es Guarda de Caza por el Ministerio del Interior, Guarda Particular de Campo, y Guarda de Coto de Caza por la Federación Andaluza de Caza, siéndole imputado un delito contra la flora y fauna silvestre. Al otro individuo se le denuncio administrativamente.
Del mismo modo, la zona donde estaban practicando la caza de forma ilegal es un lugar de campeo del Lince Ibérico.
