CÓRDOBA, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -

El grupo de investigación de la Universidad de Córdoba (UCO) de Enfermedades Infecciosas estudia la influencia de este tipo de patologías en el ganado (gripe aviar, enfermedades porcinas o lengua azul), así como en distintas poblaciones de animales silvestres, con la intención de establecer algunas medidas para erradicarlas.

Un comunicado de la propia universidad resaltó que la importancia de estos males es "enorme" por las pérdidas económicas que generan y por tratarse de zoonosis, es decir, enfermedades que se transmiten de los animales al hombre.

Uno de los resultados más relevantes que han deparado de momento las investigaciones está en relación con la incidencia de la lengua azul en rumiantes silvestres como la cabra montés, el muflón o el ciervo, donde se ha llegado a la conclusión, entre otros datos, que "el 41 por ciento de los animales silvestres analizados ha tenido contacto con el virus", lo cual implica que podrían quedar como reservorios de la enfermedad.

En cuanto a esta patología, los científicos cordobeses realizaron estudios epidemiológicos para explicar adecuadamente la enfermedad desde el punto de vista médico, buscando así el establecimiento de una relación significativa entre diferentes variables de la explotación ovina y las posibles causas de los elevados índices de mortalidad y morbilidad encontradas por los veterinarios de campo.

En cuanto al sector porcino, los esfuerzos del estudio se centran en las infecciones propias de los procesos digestivos, como es el caso de la salmonelosis porcina, que provoca una inflamación del estómago y del intestino debido a la bacteria 'Salmonella' o la 'Colibacilosis', enfermedad digestiva que afecta, principalmente, a los cerdos lactantes, producida por la bacteria 'Escherichia coli'. También investigan procesos generados por 'estreptococos', otro tipo de bacterias que da lugar a afecciones nerviosas (ataxia, temblores, posturas anormales, etc,) que, además, tienen importantes implicaciones en la salud humana.

En cuanto a las medidas sanitarias que se toman para erradicar la enfermedad, los animales domésticos son vacunados, se les trata de aislar e impedir el contacto con los insectos vectores y la inmovilización de los animales en caso de existir algún brote. Por otra parte, es muy complejo vacunar a los animales no domésticos y el equipo está estudiando un plan de control.