Innova.- El Banco de Germoplasta vegetal andaluz cumple 25 años desde que comenzara su actividad en 1981

Actualizado: martes, 10 enero 2006 20:34

SEVILLA, 10 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Banco de Germoplasma Vegetal Andaluz (BGVA), ubicado en el Jardín Botánico de Córdoba, desde que comenzara su actividad en 1981, ha desempeñado una "extraordinaria" labor en tareas de conservación de la flora silvestre andaluza con un total de 6.000 muestras de semillas pertenecientes a unas 2.000 especies y subespecies vegetales de toda Andalucía.

Así, el objetivo prioritario del banco es preservar aquellas especies endémicas y en peligro de extinción mediante la recolección de semillas que son almacenadas en una cámara subterránea climatizada compuesta por una treintena de frigoríficos que las mantiene a -5º y -20º centígrados, garantizando así su conservación, según indicó a Europa Press Andalucía Investiga, el programa de divulgación científica de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa, en un comunicado.

En este sentido, el BGVA posee una colección de semillas activa o de intercambio que está a disposición de otros bancos e instituciones a los que pueden enviarse ejemplares para labores de investigación, mientras que la colección base constituye el "seguro de vida de muchas de las especies endémicas de Andalucía", según explica su director, Esteban Hernández Bermejo.

"La colección base de semillas permite asegurar la pervivencia de especies que están cercanas a la desaparición y constituye un seguro de vida complementario más allá de la conservación in situ", precisa Hernández Bermejo.

"Por otra parte --continúa-- la colección activa es de acceso inmediato y nos permite proporcionar semillas de ciertas especies y subespecies vegetales sin tener que acudir al medio natural para recolectarlas, evitando así que se produzcan daños en los ecosistemas. Es un préstamo que tomamos de la naturaleza y que tenemos que gestionar de forma eficaz".

Gracias a la existencia del BGVA ha podido ser repuestas algunas especies desaparecidas del medio natural, incluso en territorios alejados de Andalucía, ya que el banco preserva algunas semillas de variedades de fuera de la comunidad autónoma. Este es el caso del jaramago de Alborán que, una vez desaparecido de esta zona, pudo ser propagado de nuevo en este territorio a partir de semillas conservadas en el BGVA.