SEVILLA, 3 Jun. (EUROPA PRESS) -

Un grupo de expertos del Instituto de la Grasa en Sevilla, perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha iniciado un proyecto de excelencia, dotado con 152.878 euros, con el objetivo de encontrar soluciones "más eficientes" a la producción del aceite de oliva, "dándole nuevas utilidades al alperujo, uno de los subproductos más contaminantes y utilizado como biomasa para la producción de energía".

Según indicó Andalucía Investiga en una nota, el equipo, dirigido por Juan Fernández-Bolaños, apuntó a diversos usos del alperujo debido a la gran cantidad de compuestos minoritarios que lo componen.

Para Fernández-Bolaños, las propiedades beneficiosas del aceite de oliva se deben, en gran parte, a la presencia de estos compuestos, de los cuales sólo pasa al aceite un diez por ciento durante la extracción, mientras que el resto permanece en el subproducto. Por ello, consideró el alperujo como "una fuente rica de compuestos bioactivos y de gran interés para el desarrollo de nuevos productos".

Los investigadores del CSIC han desarrollado un sistema de vapor que permite la "solubilización" de estos compuestos, un procedimiento que facilita la separación de las fases líquida y sólida y disuelve la mayor parte del sólido en el que se concentran. Esta reducción permitirá nuevas aplicaciones del orujo o el alperujo.

En este sentido, han iniciado la comercialización industrial del principal antioxidante presente en la aceituna, el hidroxitirosol (HT), bajo el nombre comercial de 'Hytolive', "con gran potencial de aplicación como antioxidante natural en las industrias alimentaria, farmacéutica y de cosmética".

Precisamente, los investigadores del Instituto de la Grasa se plantean entre sus objetivos la obtención de derivados del hidroxitirosol, la obtención de biodiésel y el estudio del sólido final como fertilizante.