FDAPA tacha de "desastroso que se haya dejado todo a la improvisación" y no se hayan adoptado ya medidas
MÁLAGA, 3 Ago. (EUROPA PRESS) -
Una treintena de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (AMPAS) de Málaga han criticado la "inacción" de las administraciones públicas, la Junta de Andalucía y los ayuntamientos de la provincia, ante la próxima vuelta al colegio en septiembre con las necesarias medidas de seguridad e higiene para toda la comunidad educativa.
También ha mostrado su malestar la FDAPA en Málaga, que este lunes ha registrado un escrito en el que se tacha de "desastroso" que a fecha actual "se haya dejado todo a la improvisación y no se tomaran medidas anteriores, suponiendo tener que esperar hasta septiembre, a las puertas del inicio de curso".
En un comunicado, las AMPA firmantes consideran "inaceptable que a estas alturas no se haya tomado ni una sola medida para comenzar el próximo curso escolar en la situación sanitaria de pandemia", entre las que bajar la ratio es "imprescindible".
Es más, aseguran que meter en un aula a entre 25 y 28 alumnos en Primaria e Infantil y de 30 a 35 en Secundaria y Bachiller "durante cinco horas al día, cinco días a la semana, es negligente".
Así, pese a que al inicio de la pandemia las "prisas e inexactitudes o decisiones erróneas eran más o menos entendibles", ahora, con la información actual, no lo es y el hecho de mantener las ratios iguales que en tiempos de normalidad, aseguran, "es un riesgo que el país no podría asumir porque estaría bajo estado de alarma en pocas semanas".
También aluden estas familias de alumnos a las posibles consecuencias legales: "Nos estamos organizando contra aquellos funcionarios públicos que tomen medidas que pongan en riesgo la salud e integridad de los menores y sus familias. Los funcionarios públicos tienen responsabilidad ética, administrativa, civil e incluso penal".
Las AMPA califican de "humo" la contratación de profesorado anunciada por la Junta de Andalucía "a bombo y platillo": "Se han contratado alrededor de 1.040 docentes menos que en el curso 2019-2020".
CAMBIOS DE PROFESORADO EN CLASES Y RATIO
Otro de los problemas para estas familias es la secundarización de la enseñanza, que hace que un estudiante "tenga alrededor de cinco o seis profesores distintos por las diversas asignaturas, quitando la importantísima función del tutor o tutora".
"Ahora con el COVID-19 tanto cambio de profesorado en una jornada lectiva repercutirá en el estudiantado y las familias en primer término y en los y las docentes en segundo término; sería una situación favorable para la propagación del virus", añaden, sin olvidar también a especialistas como logopedas, orientadores/as, PTES o PTIS que comparten función con varios centros educativos públicos.
Las AMPA firmantes no se olvidan de los alumnos en riesgo de exclusión y de las infraestructuras de los centros públicos y las necesidades derivadas de la pandemia en cuanto a cumplir las normas de distancia social dado el número de alumnos por aula.
"Si ya la norma se incumple en muchísimos casos sin COVID-19, si atendemos a las recomendaciones sanitarias para salvaguardar la seguridad del 1,5 o dos metros de separación, con o sin mascarilla, es inviable sin una bajada de ratio por aula", han reiterado. También se han preguntado qué sucede con zonas comunes, gimnasios, bibliotecas o aseos, considerando que "ya sí que es un caos".
Asimismo, apuntan a la desinfección "a cada hora lectiva de las zonas comunes y materiales deportivos y prácticamente en la desinfección de baños por cada uso de un menor; parte que le compete a los ayuntamientos, con sus respectivos aumentos de personal y recursos".
Las AMPA reclaman que al igual que a los docentes se les dotará de mascarillas e hidrogeles se haga con las familias: "No todas pueden desembolsar un montante al mes en mascarillas oficiales sanitarias y por tanto no protegerán realmente; es llevar cualquier trozo de tela en la boca, dando falsa sensación de seguridad".
Así, han esperado que la Administración tenga elaborado ya un plan para la educación a distancia y respecto a los protocolos contra el coronavirus han recordado que los equipos directivos "no son expertos en sanidad ni en epidemias" por lo que han exigido que cualquier medida a adoptar esté avalada por especialistas y expertos sanitarios que visiten "uno por uno los centros educativos".
En definitiva, las AMPA exigen una bajada obligatoria de ratio por aula, un aumento también obligatorio de la plantilla docente y de especialistas "que sea real y efectiva para cubrir la bajada de ratios"; búsqueda de espacios para permitir la distancia mínima de un metro y medio entre personas, como la habilitación de edificios socioculturales de propiedad pública; más medios humanos y materiales para limpieza y desinfección continua en jornada de mañana y tarde; protocolos sanitarios individualizado por centro según las peculiaridades de cada uno y elaborados por expertos y otro para aquel personal y alumnado en riesgo por patologías.
Asimismo se pide la incorporación de una figura sanitaria (médicos o enfermeros) en cada centro desde el inicio de la jornada lectiva, flexibilidad en los horarios de entrada y salida para evitar aglomeraciones y presencia de las AMPA en las reuniones.
Igualmente en el escrito apoyan a los equipos directivos e incluso si optan por dimitir ante la situación generada: "Somos conscientes del acoso al que se están viendo sometidas muchas direcciones que han dado nombre y apellidos".
Las AMPA firmantes defienden a los docentes "que luchen por los derechos de los menores y por sus derechos laborales", al igual que el personal de administración y servicios, limpiadoras, extraescolares y personal de los comedores.
Igualmente, reclaman a las familias que se movilicen "y asuman el papel determinante en este proceso: presencialidad sí, pero con seguridad y garantías".
FDAPA
En línea con lo anterior, desde la Fdapa consideran "insuficiente" la respuesta de la Administración pública y las diferencias que habrá entre zonas que sí pueden cumplir las medidas y las que están "masificadas".
"En esta situación mantener los recursos para educación similares a los que acontecían cuando no estábamos en estado de alarma sanitaria y pretender continuar con la estructura educativa, es una postura inacertada", sostienen.
FDAPA Málaga insta a la Administración educativa y a su Vicesecretaria de Educación de la Junta de Andalucía, María del Carmen Castillo, "a dar soluciones a las singularidades de los centros educativos, que por sus peculiaridades, no pueden cumplir las medidas necesaria para proporcionar un entorno seguro".
"FDAPA Málaga no se considera con la suficiente autoridad para definir cómo debe ser la vuelta al colegio en septiembre, ya que no estamos especializados en materia de riesgos laborales y entornos seguros a nivel sanitario", aseguran, al tiempo que reclaman las medidas necesarias para que una vuelta al colegio presencial sea posible, solicitan que se pongan "a trabajar" y lamentan la "incertidumbre innecesaria" por la que están pasando las familias ante la próxima vuelta al cole.
