MÁLAGA, 7 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Málaga ha logrado en el último año y medio un ahorro de 2,3 millones de euros en el consumo eléctrico, según ha informado la concejala de Servicios Operativos y Régimen Interior, Teresa Porras, quien ha destacado que esta disminución es el "fruto" del trabajo y de la inversión realizados para conseguir una mayor eficiencia energética.
Según Porras, el Área de Servicios Operativos tenía un presupuesto en 2013 para pagar la factura de electricidad de 11,8 millones de euros; sin embargo, terminará 2014 con un coste de 9,5 millones, lo que supone un ahorro de 2,3 millones.
Para el presente ejercicio el Consistorio había presupuestado un millón menos que en 2013 --un total de 10,8 millones de euros-- y finalizará el año con "un considerable ahorro", ha resaltado a Europa Press Porras, ya que las 24.000 facturas que abona anualmente el Ayuntamiento por consumo eléctrico supondrán esos 9,5 millones.
La edil de Servicios Operativos ha explicado que esa disminución ha sido posible a través de los planes de optimización del alumbrado público con lámparas más eficientes, la introducción paulatina y estudiada de las luminarias de tipo led y de equipos de ahorro, el control adecuado del encendido y apagado, el ajuste de la potencia contratada de cada uno de los 1.900 suministros que tiene el Ayuntamiento, la mejora de las tarifas eléctricas y sobre todo gracias a "un equipo humano capaz de controlar más de 24.000 facturas de electricidad al año para que no se pague ni un euro más del debido".
Aunque el Ayuntamiento no ha dejado de trabajar en lo que se refiere a tarifas, instalaciones y equipos de ahorro para conseguir la optimización del coste de la energía, fue principalmente a partir de 2010 cuando el Área de Servicios Operativos, a través de la entrada en vigor del Real Decreto de Eficiencia Energética y del de Protección del Cielo Nocturno y los desarrollos tecnológicos, cuando pudo planificar actuaciones que han culminado en "un verdadero éxito de disminución de la factura energética".
El suministro de energía eléctrica a las instalaciones municipales comprende cerca de 2.000 puntos, entre los que se encuentran el alumbrado público de calles, colegios, bibliotecas, monumentos, fuentes, semáforos y edificios administrativos, entre otros.
FAROLAS
A finales de 2013 terminaron los trabajos de mejora de la eficiencia energética. Se sustituyeron 55.933 lámparas del total de 60.715 farolas existentes en la ciudad y también se contemplaba la optimización de las tarifas eléctricas y la regulación de los relojes astronómicos para el encendido y apagado de las instalaciones.
Las nuevas lámparas son en su mayoría de vapor de sodio, habiéndose eliminado las que quedaban de vapor de mercurio --ya no homologadas--, de modo que la ciudad se adapta a la normativa vigente.
Por otra parte, con esta medida se ha reducido la contaminación lumínica en un 40 por ciento ante la disminución del flujo luminoso reflejado, y se han dejado de emitir a la atmósfera 5.518.031 kilos de dióxido de carbono --gases de efecto invernadero--, que es lo que absorbería un bosque de 18.340 árboles.
La potencia ahorrada equivale a la de 1.500 hogares. En definitiva, se trata de reducir los costes del suministro eléctrico mediante la transformación de instalaciones para hacerlas más eficientes, aplicando las últimas tecnologías y así también cumplir los compromisos del Ayuntamiento con el Pacto de Alcaldes.
PACTO DE ALCALDES
Este pacto es un movimiento europeo, en el que participan autoridades locales y regionales que han asumido el compromiso voluntario de mejorar la eficiencia energética en sus territorios, proponiéndose los firmantes superar el objetivo de la UE de reducir en un 20 por ciento las emisiones de dióxido de carbono antes de 2020.
El plan llevado a cabo por el Ayuntamiento está apoyado por organizaciones ecologistas y científicas como el Grupo de Protección del Cielo, que solicitó la necesidad de disminuir la potencia de las lámparas, ahora sustituidas; el Centro de Ciencia Principia; la Agrupación Astronómica de Málaga; la Red Andaluza de Astronomía, y la Asociación contra la Contaminación Lumínica.
