Unos 50 alumnos de primero de Primaria sintetizan en recetas lo aprendido en Lengua, Matemáticas, Inglés y otras competencias
MÁLAGA, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Colegio El Pinar, ubicado en el municipio malagueño de Alhaurín de la Torre, ha llevado a cabo durante el último trimestre del curso escolar un proyecto solidario centrado en el aprendizaje de los alumnos a través de la gastronomía.
"La cocina está muy de moda, es un tema de actualidad y está muy en auge para los niños", ha explicado Lourdes Molina, una de las profesoras que propuso esta actividad y que ha capitaneado la iniciativa, haciendo referencia a programas como Master Chef Junior.
Esta iniciativa ha consistido en que cada alumno ha tenido que desarrollar una receta escogida por ellos con la ayuda de su familia. Todas estas han sido recogidas en un recetario, donde cada página es una receta de un niño diferente, de poco menos de 60 páginas que, junto a menús, ingredientes, procesos de elaboración e historia de los alimentos recoge las vivencias destacadas que han tenido lugar durante los meses de trabajo.
De esta manera, estudiantes de seis y siete años han sintetizado durante varios meses lo aprendido en Lengua, Matemáticas, Inglés, Francés, Ciencias Naturales, Arte y Dibujo o Nuevas Tecnologías en más de 40 recetas con las que han estimulado el paladar aprendiendo.
"Era el proyecto perfecto para el tercer trimestre porque son niños que se están iniciando en la lectura y la escritura, y a final de curso ya tienen asentadas las bases, la creatividad y han entrado en la rutina de las clases", ha detallado Molina.
"Han aprendido de una manera muy significativa y dinámica a calcular y hacer cuentas con recetas; escribirlas; elaborarlas; aprender los verbos relacionados con la cocina; aprender vocabulario en inglés; etcétera", ha subrayado la profesora.
El objetivo, han explicado desde el Colegio, es que los alumnos se impliquen en el proceso de enseñanza y se conviertan en los protagonistas de su propio aprendizaje, pues son ellos los que buscan la información, elaboran las recetas, preparan los alimentos con la ayuda de sus padres, etcétera.
"Los niños han recibido este proyecto encantados, han disfrutado mucho porque son muy creativos y les encanta inventar y diseñar cosas nuevas", ha señalado Molina, asegurando que entre los padres la acogida también ha sido buena. "Les hemos pedido mucha participación y ha sido un proyecto muy bonito que ha llegado incluso a los abuelos", ha puesto en valor la profesora.
"Ha sido una experiencia profundamente positiva desde el punto de vista didáctico, en la que hemos sacado partido a la creatividad de los niños y que nos ha servido para enlazar con temas nutricionales", ha asegurado, añadiendo que, en este sentido, han mejorado la relación de los pequeños con la comida.
COMIDA BENÉFICA
Además, entre las recetas elaboradas por los alumnos, algunas fueron expuestas en el colegio por parte de los padres y niños protagonistas de esos platos. Asimismo, se llevó a cabo un concurso gastronómico con degustación de comida que tuvo como jurado a la periodista especializada Laura Escobar.
De los platos expuestos se escogieron tres, que formaron el menú de la comida benéfica con la que se culminaba el proyecto. Gracias a esta actividad han recaudado un total de 300 euros que, aunque es una cifra "simbólica", han reconocido, será donado a la ONG Médicos Sin Fronteras.
Debido a la buena acogida de esta actividad, Lourdes Molina, que desarrolló la idea junto a las profesoras Lidia Cotillas y Alicia Otero, ha asegurado que van a continuar y perfeccionar el proyecto para que continúe el próximo año en el primer curso de Primaria así como que seguirán desarrollando nuevas propuestas.
