Detienen a tres personas por su implicación en la venta por 600 euros de un falso diamante negro

Espinelas intervenidas por la Policía Nacional en Málaga
EUROPA PRESS/POLICÍA NACIONAL
Actualizado: martes, 18 marzo 2014 11:05

La piedra era en realidad una espinela, aunque contaba con un certificado expedido por un experto gemólogo

MÁLAGA, 18 Mar. (EUROPA PRESS) -

Agentes de la Policía Nacional han detenido en Málaga a tres individuos, uno de ellos de 72 años, por, presuntamente, tratar de hacer pasar una espinela por un diamante negro, amparados en un certificado falso elaborado por un experto gemólogo.

La investigación comenzó cuando se tuvo conocimiento de que una persona había comprado un diamante negro de dos quilates por 600 euros, tratándose en realidad de una espinela cuyo precio es inferior, según ha informado el Cuerpo Nacional de Policía en un comunicado.

Las primeras indagaciones constataron que uno de los detenidos, de 72 años, compraba por Internet espinelas de bajo valor. Después, supuestamente, las llevaba a un experto gemólogo que expedía un certificado de autenticidad de diamante por 35 euros.

Este documento falso certificaba que la pieza era un diamante, cuando en realidad se trataba de una espinela de mucho menos valor, han apuntado desde la Policía Nacional.

El primer implicado, amparado en el certificado falso, vendió a un tercero la gema negra a 300 euros el quilate. Éste, al percatarse del engaño, a su vez lo revendió a un tercero. Por estos hechos, los agentes detuvieron a los tres como presuntos responsables de los delitos de falsedad documental y estafa.

SIN POSIBILIDAD DE ERROR

El experto gemólogo alegó un error involuntario en sus certificados, pero los investigadores han podido acreditar que dicho fallo es imposible por las técnicas científicas que se utilizaron para la certificación de los diamantes, tales como la prueba de conductividad térmica, la lupa binocular, el estudio de la fluorescencia para determinar la composición química y el índice de refracción de la muestra.

La investigación ha sido llevada a cabo por agentes adscritos al Grupo II de Fraudes de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta de la Brigada Provincial de Málaga.