Economistas se muestran en contra de medidas, como la subida de impuestos, que supongan frenar el consumo

Actualizado: viernes, 11 septiembre 2009 17:27

Subrayan que la crisis está afectando con "más virulencia" en Málaga que en otras provincias y señalan el empeoramiento del turismo

MÁLAGA, 11 Sep. (EUROPA PRESS) -

El decano del Colegio de Economistas de Málaga, Juan Carlos Robles, se mostró hoy "rotundamente en contra" de medidas, como la subida de los impuestos, que "contribuyan a deteriorar el consumo" y apostó por alternativas "globales" que favorezcan "a quien representa el motor de la economía, como son las empresas".

En la presentación del segundo Barómetro Económico de la provincia de Málaga, Robles explicó que una medida de subida fiscal a través del impuestos sobre la renta o impuestos indirectos, como el carburante o el IVA, "puede deprimir el consumo" y por tanto "abortar la recuperación".

En este sentido, abogó por un pacto de Estado por el empleo y por abordar la reforma laboral, así como por "incentivar a quien crea empleo, porque el Estado no es el que lo crea, sino que tiene que propiciar la situación más favorable para que las empresas creen empleo". "No se trata de subvencionar, sino incentivar", apostilló.

Así, apostó por otorgar beneficios a las empresas, como reducción de las cuotas de la Seguridad Social, y por reducir el gasto público en cuanto a la estructura de las tres administraciones "que es muy pesada como para tirar de la economía".

MÁLAGA

La primera conclusión del barómetro es que la provincia de Málaga "está mucho más afectada por la crisis que el resto de Andalucía y que la media de España", según el informe, en el que se insiste en que los puntos que baja el Producto Interior Bruto (PIB) "inciden en mayor porcentaje" en Málaga en el desempleo. Así, el decano indicó que las cifras de paro son "casi escandalosas" y entendió que en líneas generales "el próximo trimestre será posiblemente peor a éste".

No obstante, los economistas apuntaron que la salida de la crisis "puede ser incluso antes" en la provincia "porque la caída ha sido en vertical y hay zonas, como Marbella, que llevan más años en crisis". Además, entienden que Málaga debe ser "más compensada", ya que "durante los años de bonanza ha contribuido de forma manifiesta a engrosar las arcas" públicas, apostando por una mayor aportación de inversiones del sector público en la provincia.

Respecto a la construcción, en el primer semestre se iniciaron "sólo" 2.276 viviendas, según indicó uno de los autores del informe, Fernando del Alcázar, quien apuntó que las licitaciones públicas han descendido un 29 por ciento en términos interanuales. Otro de los analistas, Antonio Pedraza, apuntó que este sector es el que "destruye más empleo", aunque las tasas negativas de las hipotecas constituidas y la compraventa de viviendas "empiezan a ser positivas".

Sobre el turismo, los representantes del Colegio de Economistas mostraron su preocupación "ante el empeoramiento" que puede haber en el próximo semestre en este subsector, que ya se ha visto "resentido" en el primero con la caída del tráfico aéreo internacional a niveles anteriores a 2004.

El descenso de turistas extranjeros "ha sido paliado de alguna forma" por españoles que eligieron destinos más baratos "también por la crisis", según el decano, quien indicó que el Turismo "ha salvado la cara hasta que ha podido al ser un sector muy profesionalizado", aunque resaltó la necesidad de mejorarlo "porque es lo que tenemos para competir".

En este sentido, el barómetro señala que los brotes verdes se están dando fuera de España, principalmente en Alemania y Francia, por lo que los economistas malagueños consideran que esto "debería ser aprovechado con urgencia en sectores exportadores", como es el turismo en lo que respecta a la provincia de Málaga.

Por otro lado, lamentaron que los únicos indicadores de mejora "no son económicos sino en cuanto a nivel de confianza empresarial y el índice de esfuerzo para la adquisición de viviendas" y criticaron que el empresario inmobiliario "no está trasladando" al precio final del producto los factores de recuperación, así como que no se está trasladando al consumidor final la bajada del precio del dinero.