MALAGA, 2 Abr. (EUROPA PRESS) -
Los comerciantes del municipio malagueño de Marbella pidieron hoy al equipo de gobierno que dimita, después de la operación 'Malaya' contra la corrupción en el Ayuntamiento marbellí, y, aunque coincidieron en que lo ideal sería la convocatoria de elecciones, abogaron, en caso de que esta alternativa no fuera posible, por la creación de una gestora que se haga cargo del Consistorio hasta los comicios municipales de 2007.
Así, el presidente de la Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa de Marbella, Antonio Núñez, afirmó a Europa Press, después de que ayer los miembros del equipo de gobierno pusiesen sus cargos a disposición de los organismos o estamentos superiores, pero no optasen por dimitir, que una situación "excepcional" como la que vive en estos momentos la localidad costasoleña "requiere medidas excepcionales", las cuales, tal y como subrayó, "no pasan por mantener al gobierno".
Núñez, quien lamentó que "la mala gestión desarrollada hasta el momento por el Ayuntamiento marbellí haya hecho que tengamos un pequeño y mediano comercio con una situación gravísima", reclamó que, "dentro de la legalidad, se adopten las fórmulas para que el equipo de gobierno no continúe ni un día más porque seguirá perjudicando a Marbella".
Aunque la gestora "sólo se haga cargo del mantenimiento de los servicios básicos, la realidad es que en Marbella ya había una parálisis en la gestión del Ayuntamiento", según Núñez. De todos modos, demandó a los poderes públicos que si, finalmente, se opta por crear este órgano, "se explique muy bien al conjunto de la ciudadanía qué es y cuáles son sus funciones".
En este sentido, el representante de la Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa de Marbella manifestó que la composición de la gestora "debería realizarse con el máximo consenso posible; si es posible, la unanimidad de todos los partidos democráticos".
SAN PEDRO ALCANTARA
Por su parte, el presidente de la Asociación de la Pequeña y Mediana Empresa de San Pedro Alcántara (Apymespa), Juan Luis Mena, abogó de igual modo por la dimisión del equipo de gobierno, así como por la disolución de la Corporación y por la creación de una gestora, en el caso de que no haya tiempo para convocar elecciones.
Esta gestora sería, a su juicio, "lo más fácil o lo menos malo" para garantizar los servicios mínimos y para que el Consistorio "empiece a entrar en una dinámica normal, que lleve a que no falte, como ha llegado a ocurrir aquí, papel para fotocopias, papel higiénico o bolsas de basura". "Es lamentable en un Ayuntamiento que debería ser muy rico", apostilló.
Mena indicó a Europa Press que, detrás de los políticos, hay "muy buenos técnicos y creo que si esa gestora se pone a trabajar urgentemente con éstos, no creo que haya problemas".
Asimismo, solicitó a los poderes judiciales y políticos que "den una solución lo más urgente posible para que Marbella no esté en boca de todo el mundo como una ciudad en la que puede ocurrir cualquier cosa, eso no es bueno y seguramente va a pasar una factura importante en los próximos dos o tres años".
"Sabemos que el despilfarro de dinero empezó hace muchos años, y se ha visto, con tres alcaldes en la cárcel y cientos de expedientes judiciales abiertos", señaló, al tiempo que criticó que "todas las instancias de este país han actuado muy lentamente, perjudicando a los vecinos y comerciantes de Marbella".
CASCO ANTIGUO
Por último, la presidenta de la Asociación de Comerciantes y Profesionales del Casco Antiguo de Marbella, Carola Herrera, declaró que éste es ya el fin de toda una época, así como una situación que "se tenía que haber producido hace tiempo".
Para Herrera, la operación 'Malaya' "sólo tiene efectos positivos porque la situación ya no se podía mantener más tiempo". "Un sistema en el que se implanta la corrupción, en un Estado de Derecho tiene que acabar mal porque no es normal", destacó a Europa Press.
Ante esta situación, solicitó a los partidos políticos que "sean generosos", ya que, según añadió, "ahora mismo es el momento de llegar a un acuerdo y no plantear intereses partidistas, sino de gobernar lo más sensatamente posible".
La solución, al igual que dijeron Núñez y Mena, es la disolución de la Corporación municipal, un hecho que este colectivo ya demandó en 2003 cuando se presentó la moción de censura contra Julián Muñoz. "No era normal --aseveró-- que un municipio lo gobernasen más de 20 tránsfugas; no era una situación democrática ni lo que se había votado".
Desde entonces, "este equipo de gobierno ha hecho un poco lo que le ha dado la gana y, por ello, la disolución debe ser la solución definitiva". De hecho, reconoció que la convocatoria de nuevas elecciones sería "lo ideal" para que "el pueblo de Marbella decidiera", pero si legalmente no es posible porque no hubiera plazo, optó por que se constituya la gestora.
PERDON
En cuanto al perdón que públicamente pidió ayer al pueblo el alcalde en funciones, Tomás Reñones, en nombre de sus compañeros del equipo de gobierno, los tres representantes de los comerciantes marbellíes coincidieron en decir que "no sirve de nada, puesto que el mal ya está hecho", por lo que, según Núñez, "para facilitar más las cosas deberían dimitir".
El presidente de Apymespa expuso que "no sirve porque intuimos que desde hace mucho tiempo ya se estaban malversando fondos", mientras que Herrera comentó que "reconocer los errores es de sabios y siempre se agradece", advirtiendo, sin embargo, de que "es tardísimo y el daño que se ha hecho a la ciudad es mucho".
